Punto de Vista
Por Jesús Michel Narváez
¿Paridad de género o desechado por Andrés Manuel López?
Escoja la hipótesis que prefiera.
La verdad siempre quedará escondida.
Después de 18 horas de “negociaciones”, Omar García Harfuch, no será candidato a la Jefatura de Gobierno de la Ciudad de México. Clara Brugada lo sacó de la jugada. ¿Acaso habrá sido el huésped temporal de Palacio Nacional el factor que actuó en su contra?
Sea como fuere, se corrobora que Claudia Sheinbaum, tiene un bastón de no mando. Su primera decisión como la mujer que dividió la fingida unidad de Morena, recibió el primero y quizá no el último revés político en la búsqueda de ser la Presidenta de México.
Conforme a las encuestas de hasta ahora, ganará la contienda. Y la pregunta que se fortalece con el fracaso de imponer a su exsecretario de Seguridad Ciudadana es que quien gobernará por los siguientes 6 años hasta 2030, es Andrés Manuel López. Ella será simplemente lo que siempre se ha dicho: el peón sacrificable en el tablero del ajedrez político.
Conocida la decisión de la dirigencia de Morena, se prevé una fractura hacia el interior que difícilmente se evitará pese a los triunfalismos de Mario Delgado, quien dejó en claro que la meta no es respetar la opinión de los ciudadanos, sino atender las órdenes presidenciales.
Seguramente esta mañana Andrés Manuel López dirá que “el pueblo manda”, aunque no se haya respetado.
El argumento de la “paridad de género” es legal, sí; pero se pudo evitar la ruptura proponiendo la candidatura femenina en cualquier otra de las 9 posiciones en juego.
Mario Delgado, a quien se le observaba cansado y nada alegre, dijo al término de la sesión para conocer los nombres de los candidatos:
“Sabemos que es muy importante (el interés personal), queremos ganar las gubernaturas, pero tenemos un compromiso mayor, un meta mayor, un sueño que estamos persiguiendo hacer como dice nuestra coordinadora (Nacional, Claudia Sheinbaum), hacer el segundo piso de la Cuarta Transformación y lograr que por primera vez en la historia de este país una mujer sea la presidenta de la República”.
Hubo otras sorpresas y no precisamente por la paridad de género. En Puebla, Alejandro Armenta, quien no figuró en la votación de los consejeros electorales estatales, recibió el nombramiento. Su primo, Ignacio Mier, quien presumía de que sería el próximo gobernador de la entidad, porque había cumplido con las órdenes presidenciales de cancelar los fideicomisos del Poder Judicial de la Federación y sacar el Presupuesto de Egresos de 2024 entre otras encomiendas, se mostró contrariado y anuncio que el lunes dará a conocer su posición. No será otra que acatar y pasar de San Lázaro al Senado.
Durante los avances informativos previos a la toma de decisiones, el nombre de Jorge Carlos Ramírez Marín, el expriísta que dejó el partido que le dio todo en su carrera política menos la candidatura para Yucatán, no se mencionaba. Y sin embargo, al final de la jornada fue incorporado aunque Huacho Díaz Mena será el abanderado.
Lo mismo ocurrió en Chiapas. Eduardo Ramírez, fue insertado por la fuerza y será el que busque suceder a Rutilio Escandón en Chiapas.
Las cinco mujeres: Clara Brugada, Ciudad de México; Veracruz: Rocío Nahle, Margarita González, Morelos, Alma Alcaraz, Guanajuato y Claudia Delgadillo para Jalisco.
Probablemente en las entidades sean conocidas González, Alcaraz y Delgadillo. Más allá de las fronteras estatales, poco se sabía de sus habilidades políticas para gobernar.
Los 4 hombres: Javier May, el mil usos, para Tabasco, lo que representó otro golpe para Adán Augusto López: Huacho Díaz, a Yucatán, Alejandro Armenta, Puebla y Eduardo Ramírez, Chiapas.
May recibe el premio por haber sido el “maquinista” derrochador de recursos económicos y destructor del medio ambiente para que el Tren Maya, cuyo costo se triplicará con respecto al estimado para la obra. Su enemistad con Adán Augusto es ampliamente conocida en Tabasco. Nada pesó en su contra. Cumplió lo que le ordenó su jefe y punto.
El caso de Ramírez es el pago a Manuel Velasco, por las “aportaciones para la causa” cuando gobernó Chiapas. Ya no le deberá nada el huésped temporal de Palacio. No hará falta. Suficientes intereses cubiertos.
¿Y qué hará Sheinbaum?
Su derrota, porque de eso se trata la exclusión de Omar García, se debió a no leer la línea trazada por su mentor. La propuesta de incluir en la búsqueda de la candidatura a Hugo López-Gatell mostró su descontento por el apoyo al exsecretario de Seguridad. A pesar de ello, se empeñó en seguir por su camino. Ya se demostró quién manda. Lo sabía, pero lo ignoró.
¿Está asegurada su candidatura presidencial?
El jugador de ajedrez político, que de esta materia sí sabe y mucho, se tomará el tiempo para evaluar la obediencia o la soberbia. Y quién sabe que ocurra en el muy cercano futuro de las precampañas. O, ya durante la campaña.
Al final de las nominaciones, Delgado queda como cohetero. Sheinbaum, como la fracasada. Manuel Velasco recibió las escrituras de Chiapas cuyo territorio tenía invadido.
¿Quién ganó con las decisiones tomadas?
El pueblo no.
Ya veremos qué pasa en los próximos días y sabremos si la “unidad es de acero” o al segundo incendio se derrite.
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