*Jamás se Habían Cerrado las Líneas Divisorias
*Sólo nos Queda Abierta la Tercera Frontera
*Nadie Podrá Detener Ilegales en Selvas y Desiertos
*Permanece Abierto el Cielo Mexicano, Hasta Ahora
Por Nidia Marín
Y que cada quien se rasque con sus uñas.
El mundo es ya como una serie de burbujas… agusanadas por dentro.
La burbuja mexicana apenas se formó, obligadamente, cuando Estados Unidos (parcialmente) y Guatemala cerraron sus fronteras con México, país que cada día se queda más aislado no sólo físicamente, sino en cuanto a la amistad con las demás naciones, sobre todo del Continente Americano.
El coronavirus (Covid-19) ataca sin piedad e irrumpe en la diplomacia. Y aunque sólo permanecen abiertos los cielos mexicanos, a la República Mexicana únicamente le queda llana la “tercera frontera”, con Belice, de tan sólo 193 kilómetros en tierra firme.
Es la primera vez que sucede el cierre fronterizo con el vecino del norte. Ni siquiera en el periodo de la Revolución Mexicana se obstruyó. Tampoco durante la guerra civil estadounidense y mucho menos posteriormente. Será un hito en la historia de ambos países que se clausuren temporalmente los cruces legales, aunque no el paso de trabajadores con empleos en ciudades de la Unión Americana, ni el comercio, de acuerdo al planteamiento del canciller, Marcelo Ebrard. Hoy abarca también la suspensión de visados de parte de Estados Unidos.
Durante las sistemáticas crisis entre ambas naciones había otras medidas: Ronald Reagan estableció una patrulla militar, George W. Bush ordenó más vigilancia después del ataque a las Torres Gemelas. Barack Obama también hizo lo propio.
Con sus restricciones, pero ha permanecido abierta por siglos. Son 3,185 kilómetros que cruzan por cuatro entidades de Estados Unidos (California, Arizona, Nuevo México y Texas y 29 ciudades), así como 23 sitios de cruce.
La línea fronteriza pasa por seis entidades mexicanas (Baja California, Sonora, Chihuahua, Coahuila, Nuevo León y Tamaulipas) También con 29 ciudades, entre las cuales está Tijuana, primer lugar en el mundo de cruces de frontera y Ciudad Juárez, de las de mayor franqueo. Los cruces legales suman 23.
LA LINEA FRONTERIZA CON GUATEMALA
Tampoco con Guatemala se habían cerrado, ni siquiera cuando el presidente guatemalteco Justo Rufino Barrios reclamaba las tierras del Soconusco y de Chiapas o durante las confrontaciones entre ambas naciones en los mandatos de Miguel Ydigoras Fuentes en el vecino país y Adolfo López Mateos, en México, casi una guerra derivada de la mala actuación de pescadores mexicanos.
Apenas, el pasado 17 de marzo inició el cierre de fronteras en Guatemala ordenado por el presidente Alejandro Giammattei (por cierto, médico). Son 965 kilómetros de longitud que abarcan en el lado guatemalteco los departamentos de San Marcos, con cuatro cruces; Huehuetenango, con dos; Quiché, con uno y Petén con tres.
Del lado mexicano están los estados de Chiapas (con 654 kilómetros y 11 cruces), Tabasco (con 108 kilómetros y 2 cruces) y Campeche (con 194 kilómetros) y ningún cruce oficial.
Actualmente nuestro país sólo tiene abierta la frontera con Belice. Son 278,266 kilómetros, de los cuales 193 están en tierra firme y el resto 85,266 en el límite marítimo de la Bahía de Chetumal y los ríos Hondo, Azul y Boca Bacalar Chico.
LOS CAMINOS PROHIBIDOS
Entre Estados Unidos y México el problema que se prevé se intensificará, es la migración ilegal, porque los polleros, coyotes y toda la fauna nociva incluidos los carteles continuarán con su negocio.
Es entonces que los caminos para los indocumentados (ya no hay visas) seguirán siendo los desiertos, los mares, las selvas, las montañas y los ríos.
A pesar de las severas medidas de cierres fronterizos, provenientes de otros países (como Canadá, Argentina, EU, y Guatemala, entre otros) en México falta la clausura de los aeropuertos, lo que manda al mundo el mensaje lamentable de la pequeñez de los conocimientos de quien dirige nuestra nación y exhibe el hiperpresidencialismo en marcha, o como decía el doctor Jorge Carpizo MacGregor, el presidencialismo metaconstitucional, hoy en todo su esplendor.
De todos modos, de acuerdo a las palabras del canciller Ebrard Casaubon, Estados Unidos y México analizan si suspenden o no los vuelos entre ambas naciones.
¿Cuánto tiempo permanecerá el Covid-19 haciendo estragos?
Nadie lo sabe.
