El presidente Andrés Manuel López Obrador respaldó la fusión de Televisa y Univisión, pero les pidió no maltratar a los migrantes, ni promover la discriminación en sus distintas plataformas.
Al dar su visto bueno, el mandatario explicó que será un medios de comunicación que llegará a 600 millones de personas que hablan español tanto en México como Estados Unidos.
Sólo les pedí que empeñaran su palabra de que no se va a maltratar a migrantes. Que no se permita la xenofobia ni la discriminación. Nunca más una campaña anti mexicanos, explicó.
Además, informó que los principales accionistas le hablaron sobre esta transacción y se comprometieron a pagar los impuestos de ley por dicha operación. Esta fusión busca ir por el mercado de streaming en habla hispana, actualmente dominado por Netflix.