*La Añoranza de Quedar en la Historia Como Héroe Lesiona a los Mexicanos
Por Nidia Marín
A veces se viste de negro con levita cruzada, como Benito Juárez, en ocasiones se coloca el chaleco como Francisco I. Madero, o pone la mano en el pecho como Lázaro Cárdenas y actualmente se enfunda el traje gris y corbata oscura como Adolfo López Mateos.
¿De qué se trata? De forzar a las masas para que lo crean un héroe, en este caso con la industria eléctrica, en pleno siglo XXI sin que, a su iniciativa de ley, los obedientes legisladores no le hayan quitado “ni una coma”.
No, hoy no existe gobierno, sino lesivas ocurrencias y diversos disfraces para ocultar, mediante la distracción, el desastre registrado en el país por la situación económica, el desempleo, la mal llevada pandemia, la falta de vacunas, la carencia de oxígeno y todos los “no hay” existentes en México que afectan a millones y millones de mexicanos.
La historia de las modificaciones a la titularidad de la energía eléctrica en México empezó a escribirse hace 84 años cuando las compañías privadas disminuyeron sus inversiones al haber concluido la construcción de plantas generadoras.
Ello, trajo como resultado que se agudizara el conflicto con el gobierno de México, pero sería hasta 23 años después cuando en abril de 1960 en el gobierno de López Mateos iniciaron las negociaciones para comprar las acciones de las empresas que tenían a su cargo el suministro de energía eléctrica, de los bienes e instalaciones de las compañías privadas y que operaban con serias deficiencias por la falta de inversión de capital y por los problemas laborales que enfrentaban y que habían quedado bajo el control de la ya Comisión Federal de Electricidad.
En aquel tiempo, de acuerdo del estimado reportero y amigo César Silva, el gobierno compró en 52 millones de dólares, el 90% de las acciones de The Mexican Light and Power Co., y se comprometió a saldar los pasivos de esa empresa que ascendían a 78 millones de dólares. El pago por las acciones de la American and Foreign Power Co., fue de 70 millones de dólares (otros datos señalan que fueron 65) y la negociación fue cerrada con el compromiso de las empresas de invertir en México el dinero que recibieran para evitar una excesiva exportación de divisas.
¿Hoy, cómo le va a hacer México? Se desconoce. Lo importante es pasar a la historia, aunque con otras naciones quede en la mugre.
De acuerdo con “energíahoy”, por ejemplo, en el capítulo 14, del T-MEC que habla de la inversión “actualiza las disciplinas del TLCAN en materia de protección a los inversionistas de América del Norte; y establece los mecanismos mediante los cuales los inversionistas extranjeros podrán solucionar las diferencias que pudieran surgir por la supuesta violación de las disposiciones del tratado.Como resultado de ello, este capítulo no solo mantiene, sino que también fortalece el ambiente de certidumbre para la inversión en la región”.
Del capítulo 22 sobre Empresas propiedad del Estado, dice: “Se revisarán las actividades comerciales de las empresas propiedad del estado (EPE), para que éstas se realicen bajo los principios de no discriminación y consideraciones comerciales; con el fin de no afectar el comercio o la inversión proveniente de empresas de las Partes”.
Además: “El T-MEC regulará los subsidios que reciben las EPE o que se otorguen a través de ellas. A este tipo de subsidios se les denomina “asistencia no comercial” y se refiere a la transferencia directa de fondos, donaciones o condonación de deuda; préstamos, garantías de préstamos u otros tipos de financiamiento; aportaciones de capital incompatibles con la práctica habitual de inversión, entre otros”.
Y en el capítulo 24, acerca del medio ambiente, señala: “Entre sus alcances, ve la necesidad de mantener manifestaciones de impacto ambiental en los tres países. Además de la importancia de promover la calidad del aire tanto nacional como transfronterizo; el combate a la basura marina, incluyendo los desechos plásticos; así como mecanismos voluntarios que favorezcan un buen desempeño ambiental del sector industrial”.
¿Cómo terminará el actual gobierno? ¿En qué lugar de la historia quedará este presidente?
