Por Jesús Michel Narváez
Tremendo calambre debió sentir el huésped temporal de Palacio Nacional al leer la declaración de Lorenzo Córdova al referirse a la Revocación de Mandato:
“Aún no hay certeza de que se realice”.
El consejero presidente -con cubrebocas mostrando el logotipo del INE (lo van a acusar de utilizar recursos públicos para mantener su egoísmo- dio a conocer la campaña de desprestigio, que siembra dudas y una “sombra de sospecha”, sobre el comportamiento del INE con el discurso que el organismo busca bloquear el ejercicio democrático.
El presidente López ha criticado varias ocasiones que el INE pida 2.85 millones de firmas para aplicar revocación de mandato lo cual falta a la verdad. La cifra está contemplada en el artículo 35 constitucional. No la fijo el organismo sino los congresistas federales a los que el Constituyente avaló.
En respuesta, Córdova dijo: Aun no hay certeza de que se realice, pero si así lo deciden los ciudadanos, “este Instituto ya está listo” para realizar ese ejercicio el 27 de marzo del 2022, en que los mexicanos se podrán pronunciar “con libertad, con todas las garantías y certeza de que su decisión será bien contada y será respetada” como siempre.
Sorprendió con su lenguaje. Siempre ha sido en extremo cuidadoso en sus expresiones y ha procurado no entrar en la confrontación. Sin embargo, parece que las acusaciones sin fundamento de Mario Delgado y del propio presidente López, ya “le llenaron el buche”.
Lea usted este párrafo:
“Si hay algún mal intencionado que, pretendiendo descalificar a una institución que se debe a las y los mexicanos, intenta elevar una sombra de sospecha acusando que el INE trabaja en contra de la revocación de mandato, el día de hoy podemos, con base en estas decisiones, decirles que le mienten a la ciudadanía y que intentan desprestigiar una institución que es un orgullo”.
De lo que no se ha dado cuenta el consejero o lo omite intencionalmente, es que se ha reanudado el golpeteo en contra del INE y sus integrantes. No es ocioso recordar las tres iniciativas de reforma constitucional que tiene en mente el presidente: le de energía eléctrica, ampliamente conocida por sus inconsistencias; la de la Guardia Nacional para que se convierta en el cuarto cuerpo de la Defensa Nacional y, la joya de la corona: desaparecer al INE… o cuando menos hacerlo un apéndice de la Suprema Corte de Justicia de la Nación.
Hay razón de colocar el sustantivo de incertidumbre, porque es una realidad innegable. Si los ciudadanos que tienen el derecho a solicitar la Revocación de Mandato no lograr reunir los 2 millones 758 mil 227 firmas, el proceso no se realizará. Y punto.
No es una tarea fácil para las casi 2 mil personas que han presentado solicitudes como de interesadas en promover el ejercicio revocatorio.
Hay quienes hicieron sumas y revelaron que se requerirían casi 62 mil firmas cada 24 horas. Es un decir, porque probablemente los recolectores trabajen 8 horas y solamente alcanzarían a sumar unas 20 mil.
De ahí que la incertidumbre sea una realidad. Sin embargo, el INE realiza los trabajos necesarios para, en caso de comprobar la legitimidad de las firmas, se realice el primer ejercicio democrático solicitado por la sociedad.
¿Habrá Revocación de Mandato?
Lorenzo Córdova pegó en la línea de flotación del Presidente y su partido, el oficialista Morena.
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