*¿Se Fortalecerán? ¿Se Dará Paso a una Dictadura?
*Unidad o Mayor División es la Disyuntiva en Puerta
*Un Ejército de Ciudadanos Estará al Frente de 161 mil Casillas
*El día 7 También la Existencia del INE Estará en Juego
*Intentos por Llenar el Espacio que Dejó Libre el Revolucionario Institucional
*También por Revivir el Caudillismo y Ganar Todas las Elecciones
Por Gerardo Lavalle
Con descalificaciones de todos los actores políticos que contenderán el próximo domingo en las “elecciones más grandes de la historia” de México, se prevé que serán las que confirmen la polarización de la población y en las que la democracia está en juego entre dos opciones: fortalecer las Instituciones del Estado o entrar en la recta que tiene un solo propósito: la dictadura construida desde Palacio Nacional.
La parte fundamental de los comicios tiene domicilio: San Lázaro. Ahí se juega el Gobierno Federal encabezado por Andrés Manuel López el continuismo de sus políticas que, de lograr la mayoría en la Cámara de Diputados, dividirá aún más a sus gobernados. Es la preocupación presidencial y de su partido, Morena, porque afirma que las oposiciones “quieren quitarnos el presupuesto (de egresos de la Federación) para cancelar los programas sociales (algo prácticamente imposible porque tienen rango constitucional) y regresar a la época de los ‘moches’ y la corrupción”.
En la reflexión y compromiso con la democracia, estarán 94 millones 728 mil ciudadanos con derecho a voto y las estimaciones del porcentaje que sufragará concluyen que podría ser la elección intermedia “más votada”.
La prospectiva que realizan expertos en matemáticas y analistas electorales es que podrían acudir a las urnas cerca de 47 millones de ciudadanos, lo que impondría un récord de participación. Cerca del 50 por ciento de quienes se encuentran en la Lista Nominal del Instituto Nacional Electoral.
Iniciado el 7 de septiembre, el proceso electoral que culmina en su fase crítica este domingo venidero, porque aún faltará el cúmulo de impugnaciones de todos los participantes, pondrá a prueba la capacidad de disección de quienes advierten no solo un país dividido sino el peligro de caer en la trampa de “ampliación de mandato” sin elecciones libres y secretas.
El ejército de ciudadanos que estarán al frente de las 161 mil casillas que se instalarán en todo el territorio nacional, rebasará el millón 200 mil y los representantes de los partidos políticos, 10 de los cuales 3 son de nuevo cuño y se juegan su registro nacional si no alcanzan el 3 por ciento de la votación, podrían superar el millón 600 mil.
ÓRGANOS ELECTORALES, ATACADOS COMO NUNCA
Un ambiente enrarecido campea en el país. El juego por mantener el poder y por arrebatarlo de parte de las oposiciones, ha provocado que los árbitros hayan sido blanco de críticas y descalificaciones por parte del presidente de la República, sus congresistas -Morena y aliados-, el conjunto de operadores de redes sociales denominados “Chairos” y la participación de la Fiscalía General de la República anunciando, indebidamente, a candidatos y gobernadores en ejercicio, de la existencia de carpetas de investigación, lo que ha sido calificado por los presuntos afectados, como “el uso faccioso de las instituciones”.
Al Instituto Nacional Electoral y principalmente a 2 de sus consejeros, Lorenzo Córdova y Ciro Murayama, se les acusa de encabezar al “grupo de los conservadores” con lo cual propician su tendencia antidemocrática. Al Tribunal Electoral del Poder Judicial de la Federación, cuyo magistrado presidente, José Luis Vargas, responde a las decisiones de Palacio Nacional, se le considera un órgano desapegado de la democracia, aún y cuando ha sido la tabla de salvación para candidatos de Morena y el propio partido, al cancelar sanciones aprobadas por el Consejo General del INE.
La disputa por conservar el poder público de parte del presidente López para “convertirse en el mejor presidente que haya tenido México”, desbordó límites no escritos y, sin embargo, respetados por sus antecesores, ha provocado los ataques más feroces de un Jefe de Estado hacia los órganos electorales aderezados con la amenaza de desaparecerlos e incorporarlos a otras instancias. Al INE lo quiere en la Suprema Corte de Justicia de la Nación y al TEPJF pretende colocarlo bajo la férula del Consejo de la Judicatura Federal, cuyo presidente es el ministro presidente del Poder Judicial de la Federación.
Bajo el argumento de la “austeridad republicana”, se ha insistido en que el INE “cuesta mucho dinero y no hace nada” y se “tiene que ahorrar para tener recursos en los programas sociales”.
E incluso el dirigente de Morena, Mario Delgado pidió “exterminar” al organismo. Mientras el senador Ricardo Monreal insistió en repetidas ocasiones en que el INE y el TEPJF muestran su parcialidad al sancionar candidatos de Morena además de retirarles la candidatura a dos aspirantes a gobiernos estatales, los de Guerrero y Michoacán.
Hace unos días declaró: “En los próximos días se intensificará la disputa política, se profundizará la guerra sucia, se conocerán encuestas “cuchareadas” y el ambiente se polarizará aún más. Es simple: refrendamos el proceso de transformación o retornamos al viejo régimen. Ésa es la cuestión”.
Delgado acusó al INE de estar aliado con la “mafia de la corrupción”.
Del resultado de las elecciones depende la vida o la muerte del INE.
REVIVIR EL PARTIDO ÚNICO
Durante 71 años, desde 1929 hasta 2000, el PRI -en sus tres versiones- gobernó sus anchas. Las oposiciones eran meramente observadoras y dos partidos, PPS y PARM formaban equipo satelital con el tricolor.
Mario Vargas Llosa calificó a la democracia mexicana como “la dictadura perfecta”. justamente por la forma en que se ejercía a través del partido único, el del gobierno. Por su parte, Maurice Duverger, quien vino a México a invitación del PRI, señaló: solo los mexicanos entienden al PRI.
Las elecciones organizadas por el Gobierno le daban ventaja al partido único, al de Estado como lo definieron las oposiciones -básicamente el PAN, que nació para enfrentar al PNR que después se convirtió en el PRM y finalmente quedó como en la actualidad-, era una maquinaria invencible. Ganaba el Senado, la Cámara de Diputados, los Gobiernos de los Estados, hasta 1989 que perdió Baja California-, el 90 por ciento de las alcaldías del país y otro tanto de los congresos locales.
Con Ernesto Zedillo Ponce de León, un candidato emergente por el asesinato de Luis Donaldo Colosio, el presidente marcó la “sana distancia” con PRI y las derrotas comenzaron a multiplicarse. De aquel todopoderoso partido que gobernaba al 99 por ciento del total de la población, solamente quedan los recuerdos.
Hoy, sin embargo, el presidente López y su partido, Morena, intenta llenar el espacio que dejó libre el PRI y convertirse en el caudillo que gane todas las elecciones.
Movimiento de Regeneración Nacional tiene militantes que ayer eran del PRI, del PAN, del PRD, de Convergencia Ciudadana -hoy Movimiento Ciudadano-, del PVEM y de PANAL. Muchos viejos políticos de izquierda participaron en su fundación y fueron relegados por el pragmatismo que hizo el milagro de, en solamente 3 años de tener su registro, ganar la Presidencia de la República con Andrés Manuel López que, como lo dijo en su momento “la tercera es la vencida y si pierdo me voy a Palenque (La Chingada se llama su extensa finca).
Ganó y quiere quedarse.
Estas elecciones, las segundas que se realizan dentro del gobierno morenista -las dos primeras fueron locales en Hidalgo y Coahuila y fueron arrasados los candidatos de Morena- son para el líder del partido “cruciales”. Aunque están en juego 15 gubernaturas, 30 Congresos locales, mil 913 ayuntamientos y juntas municipales, la importancia relevante la constituye la renovación de la Cámara de Diputados.
La otra parte fundamental, es conseguir cuando menos 17 congresos locales con la finalidad de contar con la mayoría del llamado Congreso Constituyente que es la instancia final para la aprobación de las reformas constitucionales.
En la mira se encuentran las gubernaturas, no tanto por lo que representen en estos siguientes años sino el valor de controlar el mayor número de entidades para las elecciones del 2024. Porque en Palacio Nacional lo saben y bien que los gobernadores operan y manipulan los comicios estatales con lo cual se suman votos para la renovación del Senado y de la Cámara de Diputados, además de los Congresos locales.
La visión del presidente López es revivir la estructura -de suyo la tiene- que hizo imbatible al PRI por 7 décadas.
No importa si ahora Vargas Llosa insiste en que se está pavimentando el camino hacia una dictadura. Al presidente López le importa que la “gente me quiera y el día que no lo haga, me voy a Palenque. (A su finca).
MANIPULACIÓN MEDIÁTICA
Estas próximas elecciones están aderezadas por la manipulación mediática, en la que es experto el presidente López y, todo mundo lo admite, es un genio para manejar los tiempos político-electorales.
Conforme se acercaba la fecha -ya estamos a 4 días- la jornada electoral, comenzó una batalla frontal contra sus adversarios, los conservadores y lo mismo acusó al INE que al TEPJF de parciales y antidemócratas, que a Claudio X. González quien junto con Gustavo de Hoyos Walther encabeza Sí por México, que al gobernador de Tamaulipas y consiguió el aún en duda desafuero, que anunció la participación de la Fiscalía General de la República en las carpetas de investigación en contra de Enrique Peña Nieto y Luis Videgaray Caso y no dejó fuera a los candidatos de la alianza PRI-PRD y al de MC en Nuevo León, a los que la FGR y la UIF les siguen los pasos para obligar a las autoridades electorales de le entidad a cancelar sus postulaciones, con la intención de que la abanderada de Morena, Clara Luz Flores repunte y gane los comicios.
Larga es la lista de instituciones y personajes que han sido mencionados durante sus conferencias mañaneras y aunque tiene prohibido hablar de los procesos electorales, el presidente hace caso omiso y día con día tiene tema relacionado con las elecciones.
Días antes de finalizar el mes, anunció la compra de la refinería Deer Park, copropiedad de Shell y Pemex, con la que presumió se dejará de importar gasolinas y diésel. La semana pasada dio a conocer que este martes pasado inició la vacunación para quienes tienen entre 50 y 59 años. Para demostrar que la inmunización va en tiempo y forma, el lunes próximo inician las clases presenciales en diversos estados del país. Como parte de la estrategia de que en México todo marcha sobre ruedas, hizo gala por el reingreso de México al top-ten de los países más atractivos para la inversión extranjera.
Y como si se tratara de un éxito personal, el presidente López festeja el incremento de las remesas de los connacionales que se encuentran en Estados Unidos. El aumento representa que hay más mexicanos en la Unión Americana por la falta de empleo y la crisis económica de la que no se recupera el país y sobre la que se tiende la figura de una recesión de largo plazo. Los inversionistas se alejan y la iniciativa privada sigue marginada de los proyectos gubernamentales. La creación de empleos es raquítica y 9.8 millones de mexicanos ingresaron al decil de la pobreza. La pandemia, que “nos cayó como anillo al dedo” (dixit López), se convirtió en una pesadilla que cobró ya 222 mil vidas y contagió a 2 millones 400 mil personas.
ELECCIONES CON SANGRE
Como lo dio a conocer MISIÓN POLÍTICA la semana pasada, estas elecciones están teñidas de sangre. Candidatos asesinados, secuestrados, desaparecidos. Familiares amenazados y sin culpables detenidos.
En estos últimos días antes de las elecciones, el enrarecimiento en el ambiente político-electoral, no ha cedido. Por el contrario, ha ido en aumento.
Serán, según los datos oficiales, probablemente en las que mayor número de candidatos que aspiraban a un cargo de elección popular, hayan sido víctimas de criminales o adversarios políticos.
GUARDIA NACIONAL, EN LAS CASILLAS
Aunque oficialmente no se ha confirmado, se sabe que la Guardia Nacional estará enfocada a cuidar el orden en las más de 16 mil casillas que se instalarán en todo el país.
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