*En Campaña Venden las Perlas de la Virgen
*Y los Alcanza la Realidad y ya sólo hay Espejitos
*El Tren Maya y Otros Proyectos en Problemas
Por Nidia Marín
México no tiene en qué caerse muerto. Esta en la Chilla. La rapiña, la corrupción, dilapidación de recursos, las malas decisiones y los caprichos sexenales lo tienen postrado.
Eso sí, todos ofrecen las perlas de la virgen y a la hora, de la hora, se topan con la realidad, ya sólo hay espejitos. El problema es que vivimos entre las grandes promesas de campaña y las enormes desilusiones de los gobiernos.
Sin ir más lejos, en este siglo nos han roto la esperanza tres presidentes Vicente Fox, Felipe Calderón y Enrique Peña Nieto.
Y ya empezó a tronar como cacahuate (de Washington) la cáscara del Tren Maya, por ejemplo. El hecho de que le vayan a recortar 50 kilómetros al Tren Maya (que en sí mismo es proyecto muy loco), para ahorrar 5,000 millones de pesos, ya dice mucho, como también habla de la problemática económica. Tampoco se sabe con certeza la viabilidad de la refinería de Dos Bocas, en Tabasco.
El tiempo, la realidad, los problemas económicos, irán señalando los errores del actual gobierno.
En los últimos seis gobiernos las cosas no han salido bien. Miguel de la Madrid, dejó una economía inestable, con tasas inflacionarias de dos dígitos, situación que limitó los planes de crecimiento, por la volatilidad existente tanto en los niveles inflacionarios como en las tasas de interés, afectándose con ello la planeación en el largo plazo, y frustrando las expectativas de crecimiento en el ingreso de la sociedad, aseguran los que saben.
Carlos Salinas recupera la economía y Durante los años de 1988 a 1994, se logra un crecimiento promedio de 3.5 por ciento, con lo cual se mejoran relativamente los niveles de ingreso comparados con los del sexenio anterior.
Zedillo más o menos la llevó bien. El crecimiento del PIB en su gobierno, tiene una caída de -6.2 por ciento en su primer año de gobierno (1995), en los años siguientes el país vuelve a la senda del crecimiento económico, teniendo en 1996 un incremento del 5.2 por ciento, en 1997 de 6.8 por ciento, en 1998 de 5 por ciento, en 1999 de 3.8 por ciento y en el último año de su gobierno de 6.6 por ciento, consideran los especialistas.
Si nos remitimos a los últimos 19 años nos ponemos a llorar.
Con Vicente Fox crecieron los empleos permanentes en cinco años y siete meses sólo 2.3% y la consecuencia fue la migración y la informalidad lo que estuvo viento en popa.
Y la prueba es que, por ejemplo, los resultados en la economía (de acuerdo al planteamiento de Ángel Licona Michel), 2001 fueron negativos -0.15 por ciento, en 2002 de 0.8 por ciento, en 2003 de 1.4 por ciento, en 2004 de 4.2 por ciento, en 2005 de 3.3 por ciento y para el 2006 de 5.2 por ciento, terminando el periodo de gobierno de Vicente Fox sin alcanzar el 7 por ciento que se había prometido y se queda en un crecimiento promedio de 2.45 por ciento
Felipe Calderón tuvo su emblema de la Corrupción: la Estela de luz, pero además en su mandato, de acuerdo con México Evalúa, 233 proyectos de infraestructura presentaron desvío de recursos, reducción inexplicable de dinero, obras inconclusas o cancelaciones, como por ejemplo la refinería de Tula.
Con Peña Nieto, hubo incremento de la deuda pública, rapiña, obras sin concluir. Y sí, también él prometió sin lograrlo que se crecería a 5% y apenas alcanzamos el 2.5% más o menos. Además, abundan los ejemplos de corrupción como el Tren México-Querétaro, entre otros.
Y sí, como indican especialistas, lamentablemente todos estos años la política económica y las políticas públicas no han correspondido a los propósitos del desarrollo nacional, mucho menos al interés nacional.