*Oaxaca y sus Viernes de Flores
*Cuando la sed Ataca, Está el Agua
*Música y Vestimentas de Antaño
Por Susana Vega López
En el estado de Oaxaca, al igual que en muchas ciudades, pueblos y comunidades de de México y otros países, la Semana Santa es una conmemoración que forma parte de la tradición cristiana y si bien cada lugar tiene su peculiaridad de recordar esas fechas, la fe con que se llevan a cabo estas tradicionales ceremonias es el común denominador en todas ellas.
La Procesión del Silencio, la Visita de las Siete Casas, el Viernes de Dolores, el Sábado de Gloria, el Domingo de Ramos, las misas y retiros espirituales, son característicos en toda esta temporada. Sin embargo, en Oaxaca hay una tradición poco conocida, pero de gran significado para los oaxaqueños, que se inserta en esta época pero que pareciera ajena a estas conmemoraciones: el “Viernes del Llano”.
El Paseo Juárez «El Llano» -uno de los principales centros de recreación familiar en Oaxaca- es frecuentemente utilizado para actos cívicos y muestras culturales temporales. En él se puede admirar un monumento dedicado a Don Benito Juárez, colocado en 1894. También allí se localiza el recinto Legislativo del estado.
El Llano cobra relevancia en esta temporada ya que ahí se llevan a cabo una serie de actividades que fueron ideadas a principios del Siglo XX por la Universidad Autónoma Benito Juárez de Oaxaca y nos referimos a los conocidos Paseos Florales donde cada viernes durante todo el periodo que dura la Cuaresma católica se realizan los Viernes del Llano.
Se trata de que cada viernes, los jóvenes elijan a la que consideran la mujer más hermosa a través de las flores. Es decir, aquella fémina que junte más flores será electa como la mujer más bella. Para esto, las jóvenes pasean alrededor del parque para que los varones, si así lo desean, les proporcionen flores por ser bonitas. La que recolecte más flores será la ganadora y tendrá el honor de ser la madrina del Viernes del Llano. Además, los asistentes pueden escuchar música de marimba y banda.
Los alumnos de educación media superior de la UABJO son quienes llevan a cabo esta tradición de cuaresma y corresponde a una preparatoria organizar, cada semana, las actividades que consisten en la selección de una madrina por grupo, quien debe efectuar un paseo alrededor del monumento al Benemérito de las Américas y a la que se le dan obsequios y flores. Posteriormente, un jurado de maestros de la escuela elije a la madrina representativa del viernes.
Otra tradición única en el estado oaxaqueño es el Viernes de Samaritana, que consiste en que el cuarto viernes de la Cuaresma, en remembranza al pasaje bíblico de la Buena Samaritana -en el que una mujer da agua a Jesús- la grey católica de Oaxaca regala a la gente (y en especial a quienes asisten a los templos católicos) agua de sabores frutales que preparan en grandes tinajas de barro.
Es común ver «puestos» fuera de las Iglesias, adornados con bugambilias y cañas en forma de arco. En algunas ocasiones, también se regala nieve de sabores para deleite de los visitantes.
El agua se comienza a ofrecer, normalmente, a partir de las 12:00, y en algunos «puestos», antes de regalar la, se hacen representaciones del pasaje bíblico con la peculiaridad de que la mayoría de las Samaritanas visten trajes típicos de la región. Casi siempre se escucha música de marimba.
Según las crónicas, esta tradición surgió en las Iglesias de San Francisco y La Merced, durante el siglo XIX. Hoy en día, no sólo las Iglesias regalan agua, también se han hecho partícipes negocios particulares, hogares católicos, dependencias de gobierno, así como escuelas públicas y privadas.
La ciudad de Oaxaca, Ciudad Patrimonio de la Humanidad, es llamada la Verde Antequera por sus increíbles construcciones de cantera verde de estilo Colonial que la hacen única en todo el país. Cuenta con una extraordinaria Catedral la de Nuestra Señora de las Asunción que tiene una gran historia y que es motivo del fervor católico de la gente en Semana Santa.