Por Jesús Michel Narváez
En la edición 1058 de Misión Política, publicada el 22 de junio, se presentó un trabajo sobre el “cúmulo” de “liberales” -no neo- que conforman el gabinete presidencial o están en el Congreso de la Unión, y que apuntan hacia la sucesión presidencial.
El presidente López había dicho que las oposiciones no tienen con qué competir en 2024 y que donde le sobran relevos es en la izquierda. E incluso ofreció prestarles a los que no cuentan con figuras.
En el trabajo publicado dimos cuenta de quiénes son descartables. No por incapaces -la mayoría lo son- sino porque no tienen idea de lo que es gobernar un país como México, hoy dividido por el propio presidente y por sus corifeos.
Le formulo la siguiente pregunta, estimado lector (ra):
Usted conoce a Rocío Nahle o a Tatiana Clouthier y ¿votaría por ellas para que se conviertan, cualquiera de las dos, en la primera presidenta de México?
O bien, ¿lo haría por Jua Ramón de la Fuente, cuyo único “mérito” fue llegar a la UNAM acompañado de la Policía Federal para fulminar la huelga que duraba ya 9 meses?
¿Llevaría a Esteban Moctezuma a la Silla del águila? Es un hombre decente que se alejó de la política tres lustros y cuyo paso por el servicio público se reduce a ser titular de la Secretaría de Gobernación, Desarrollo Social, senador de tres años y su reaparición fue en la de Educación Pública en donde la pandemia y la CNTE lo atropellaron y aún anda buscando las placas del tráiler.
El presidente Andrés Manuel López Obrador aseguró que “no hay tapados” para ser el candidato del Movimiento de Regeneración Nacional (Morena) y su posible relevo en la Presidencia de la República en 2024.
De los personajes que mencionó ayer solamente tenían posibilidades Claudia Sheinbaum, Marcelo Ebrard.
Para desgracia de los dos, la tragedia del Metro ocurrida el 3 de mayo y que quieren desaparecer mediante indemnizaciones de un millón 650 mil pesos, los exhibió tal cuales son: ella, insensible, ignorante de lo que su empleada, Florencia Serranía, hacia como directora del Metro. Él, ordenó la construcción de la Línea 12 y por las prisas por inaugurarla antes de concluir su mandato no cumplió con los protocolos para el transporte público masivo.
Ricardo Monreal se cuece aparte. Estaba en el ánimo presidencial y después de las elecciones dejó de ser cercano. Me aseguran que la relación entre el senador y el presidente “goza de buena salud”, pero inexplicablemente López no lo menciona en la lista de posibles personajes que pudieran ser los sucesores.
Después de enumerar a quienes puede relevos generacionales, el presidente expuso: “Yo voy a estar aquí hasta, eso si el pueblo lo decide, voy a una consulta en marzo del año próximo, y eso no me preocupa mucho porque sé que la gente me va a mantener el apoyo. Me preocupa más la ciencia y el creador, lo que permita la naturaleza, lo que permita la naturaleza y el creador para terminar en septiembre y retirarme”.
Recordar que cuando jefe de gobierno acuñó la frase: a mi que me den por muerto para el 2006. Se refería a que no aspiraría a ser candidato presidencial. Lo dijo una y mil veces. Lo hacia en sus mañaneras y en las entrevistas de radio y de televisión a las que tuvo acceso. Finalmente y después de ser desaforado, participó en el proceso electoral y fue derrotado por mínima diferencia por Felipe Calderón.
Hoy repite un día sí y otro también que es un demócrata y que no se reelegirá.
A tanto decirlo, hay que recordar su pasado. Y sin amarrar navajas, queda claro que su palabra no es de honor y que le gana la ambición. Es un aspiracionista.
En lo que tiene parte de razón es que en las oposiciones no se advierte un personaje con los tamaños para enfrentar a cualquiera de los que considera parte del relevo generacional.
Sin embargo, faltan 3 años para las elecciones y es probable que emerja algún personaje que provenga de la sociedad civil y se convierta en el opositor real durante las elecciones del 2024.
Me temo que el presidente López porfiará en “ampliar su mandato”, no reelegirse porque es “un demócrata” y aprovechará la consulta de revocación de mandato para exclamar: el pueblo me lo pide. Y recordará a su admirado Hugo Chávez y dirá: yo ya no me pertenezco… le pertenezco al pueblo”.
Así es el mesías tropical -creación de Enrique Krauze- y así morirá: mintiendo.
E-mail: jesusmichel11@hotmail.com, Twitter: @misionpolitica, Facebook: Jesús Michel y en Misión, Periodismo sin Regaños martes y jueves de 16 a 17 horas por ABC-Radio en el 760 de AM.