La nueva Ley de Participación Ciudadana capitalina, buscará fortalecer los mecanismos de democracia participativa, como son los Comités Ciudadanos y el Presupuesto Participativo, las consultas populares y hasta el método para la revocación de mandato, para evitar que se continúen con las malas prácticas de corrupción, compra de votos y cooptación política, así como buscar la inclusión y colaboración de la sociedad.
Ante los señalamientos de diversos sectores de la sociedad y partidos políticos de oposición sobre el intento de anular o desaparecer la democracia participativa, como son los comités ciudadanos en la capital y manipular la esfera política para un mayor beneficio a futuro, el Partido del Trabajo en la Ciudad de México refrenda su compromiso para fortalecer estos mecanismos y brindar una mayor certeza y seguridad social para los ciudadanos.
Por ello, la Comisionada Política del PTCDMX, Magdalena Núñez Monreal, exigió que “la nueva ley de participación ciudadana, la que se quiere modificar, fortalezca, de manera clara, los mecanismos de democracia participativa”.
“La Ley de Participación Ciudadana y sus mecanismos deberán ser la garantía para que participen los ciudadanos en todos los temas de interés y en los que deben opinar si les favorece o no las políticas públicas que pretendan implementar las autoridades”, comentó.
Asimismo, el Partido del Trabajo local, aplicará todo el peso de la Ley y atención en los procesos que llevarán a cabo la construcción de la nueva Ley de Participación Ciudadana para asegurar que la ciudadanía tenga los derechos necesarios y fortalecidos para participar en la integración, designación y colaboración en estos entes democráticos, los cuales son necesarios para un primer contacto entre la comunidad y el Gobierno de la Ciudad.
“Este mecanismo de participación ciudadana tiene que dejar de ser lo que en administraciones pasadas significó, un mecanismo para tener control político y dar un uso clientelar y electorero”, apuntó Núñez Monreal.
Por ello, el PTCDMX estará atento a las reformas al artículo 25 de la Constitución de la Ciudad de México, las cuales proponen disminuir el número de firmas que se requieren para que la ciudadanía solicite mecanismos de democracia directa como: revocación de mandato, iniciativa ciudadana, referéndum, plebiscito, consulta ciudadana y consulta popular, así como su vinculatoriedad.
De acuerdo con las reformas a la Carta Magna capitalina, las cuales se propusieron desde el Congreso local, y con antelación por los Constituyentes, se busca que el número de firmas este basado en la participación efectiva de votantes de las elecciones a la Jefatura de Gobierno, diputaciones y cargos públicos y no en las personas inscritas en la lista nominal de la capital.