*¿Dónde? En Sonora, Donde el Acompañamiento es un Trago de Bacanora
*“Coyotas”: así les Decían a las Hijas de Mujeres Indígenas y Españoles
*Un Recorrido por la “Venecia Mexicana”, sí, por Xochimilco
*Sus Anocheceres Enigmáticos Acompañado de Narración de Leyendas
*Desde el Embarcadero de Belem Hasta Llegar a los Llamados Sabios de Chililico
*Viajar en Trajinera viajar y Navegar por los canales Apatlaco, Texhuilo y de Japón
SUSANA VEGA LÓPEZ
Coyotas fritas, con miel o con nieve, chile chiltepín, caldo de caguamanta, birria, la gallina pinta, el menudo, el bacanora con sus premios internacionales, son productos que sólo se encuentran en el norte de la República Mexicana. ¿Dónde?, en Sonora. Pero, ¿qué son las coyotas?, un postre típico de Hermosillo que resulta ser una especie de galleta endulzada con “panocha” o piloncillo.
El director de la Oficina de Convenciones y Visitantes de Ciudad Obregón, Sonora, Moisés Corrales, luego de puntualizar que su destino es más de turismo de negocios y reuniones porque no tienen playa, comentó sobre algunos atractivos de Sonora.
Cuestionado por Misión Política acerca de lo que las personas deben comer, o por lo menos probar al llegar a su Estado, inmediatamente dijo “las coyotas, una especie de empanada dura”.
Refirió que “se le comienza a llamar coyotas porque así les decían a las hijas producto de la unión de indias con españoles. Estas mujeres, las “coyotas”, con canasta en mano, iban recorriendo las calles para vender este delicioso pan crocante por lo que la gente advertía que podrían adquirir el sabroso dulce que llevaban. La vox populi cuenta que, en el siglo pasado, en los años cincuenta, se popularizaron las coyotas.
LA RECETA
La receta original -con base en harina de trigo, manteca, y piloncillo-, se crea el siglo pasado y sigue siendo, a la fecha, un secreto de la familia Ochoa, no obstante, ya muchas personas preparan este manjar que ha llegado a gustar a propios y extraños como a los vecinos del norte a grado tal que ya se exporta a Arizona.
Es una receta que se le atribuye a la señorita María Ochoa González quien al ver a una mujer de origen español cómo preparaba su postre, quiso hacer lo mismo, aunque tuvo que adaptar algunos ingredientes por productos locales que dieron lugar a este dulce típico.
Ahora ya otros hicieron lo mismo; hay muchas variantes y los rellenos son diversos: hay coyotas rellenas con cajeta, manzana, guayaba, nutela, fresa y más.
CHILE DEL MONTE
Sin lugar a dudas, para dar ese toque picante a los platillos sonorenses se utiliza un diminuto chile redondo que asemeja un chícharo color rojo llamado chilpetín o chiltepe. Tiene un picor que gusta porque no se te queda en la lengua por mucho tiempo (como el habanero).
Es de la familia Capsicum annuum y su nombre se deriva del náhuatl “chili”, chile; y “tepín”, pulga. Además de usarse en la comida sonorense, también se utiliza medicinalmente. Crece en la sierra de Álamos y a las orillas del río Sonora, principalmente.
Los mayos, los seris, los yaquis y los guarijío (grupos étinos) hacían de la recolección del chiltepin todo un rito. Conocían su ciclo de reproducción y lo adoptaron como un ingrediente básico en la cocina y en la medicina. Lo consideraban como “maná”, un alimento especial utilizado para sanar diversos padecimientos o malestares como dolor de oído o de muelas; reumas; gripe; tos; gastritis; úlcera; hasta hemorroides; “mal de ojo” , “crudas” y más, ya sea cociendo, hirviendo, dorando, sahumando o pulverizando el chiltepin.
Con este chile se elaboran salsas que se utilizan en diferentes guisados y sopas. Por las mañanas, al momento de servir huevos estrellados, se truenan los chilitos con los dedos y se espolvorea en este básico desayuno que resulta todo un manjar por este pequeño ingrediente. Es una tradición ancestral que aún perdura en los sonorenses que comparten, gustosos, este picante que da sabor a las comidas.
Algunos estudiosos dicen que el consumo de chilpetin es muy bueno para la salud por el hecho de contener capsaicina, una toxina neural alcaloide que activa las neuronas sensoriales, mismas que liberan, en la médula espinal, la sustancia “F”, un neurotransmisor que libera endorfinas, las que dan felicidad al ser humano. Dicen que es el único chile que no hace daño, explica Moisés Corrales al hacer referencia a estudios realizados en torno a este chile.
Su sabor es tan adictivo que ha llevado a las cocineras a integrarlo hasta en las mermeladas y bombones (chocolates).
BACANORA
El funcionario afirmó que algunos productores de bacanora han ganado premios internacionales como las mejores bebidas espirituosas de México. ¨Ya existe una amplia variedad de mixología; te lo dan con jugo de pitaya, con jugo de limón, cereza, jamaica y guayaba, por citar algunas frutas. No sólo se toma puro, que lo disfrutas muchísimo, sino que hay una gran variedad de formas para beber el bacanora, desde en las rocas, con puro hielo, hasta con jugos porque combina muy bien con muchos sabores y lo hacen riquísimo”.
El bacanora es una lechuguilla, un maguey típico de la sierra baja de Sonora que se somete a un procedimiento artesanal: lo exprimen, lo añejan y cuando ya agarra 42 o 44 grados de alcohol, lo sacan a comercializar. Hay diferentes tipos de destilados, desde el blanco normal, añejado, reposado que le dan diferentes calidades y todos, sobre todo el blanco, -el que más combina- adquieren un sabor único; los otros son para paladear.
Se realizan constantemente festivales en torno a esta bebida como el Bacanora Fest donde se hace toda la mixología del bacanora, explicó Moisés Corrales.
CARNE ASADA, BIRRIA,
CAGUAMANTLA
Lo imperdible para comer es la carne asada de Sonora, aunque los mariscos también son de los mejores de todo el país.
Algo típico que no vas a encontrar en otro lugar, aunque pareciera lo mismo, es la birria. La birria en Obregón es con caldo “es que en otras partes te venden la birria seca”. Es birria con chile, de color rojo “es que he visto que en otras ciudades te la dan blanca; ¡un taco de birria blanca!, nooo”; además, puntualiza, se hace con carne de chivo que le da un sabor característico.
La caguamanta es un caldo de mantarraya aunque anteriormente era de caguama, de tortuga, pero como ya casi no hay, ahora es de mantarraya, con camarón, aleta de tiburón; es decir, se las ingeniaron para ajustar la caguamanta, un platillo típico de la ciudad.
Probar la cecina es indispensable, así como los hot- dogs de Ciudad Obregón o, por las noches, comer la parrillada, donde te sirven un plato sonorense que se sirve con tripitas, cecina, carne asada… en fin, toda una parrillada completa. Es un plato preferido porque no sólo es carne asada, sino que te abarca hasta diferentes cortes de carne. Eso lo acompañan con tiras de queso panela, chiles asados, frijoles maneados, totopos, tortillas de harina, maíz, más la guarnición que resulta ser un banquete exquisito.
“Luego viene el postre, donde te sirven una coyota con miel, con nieve, helado o simplemente frita pues al lado de las carnes te ponen la coyota y se vuelve a gratinar el piloncillo o panocha que le decimos nosotros y queda como recién horneada, ¡bien sabrosa!”, dice.
Cabe mencionar que Moisés Corrales fue entrevistado en el estand que el estado de Sonora armó en el Tianguis Turístico que, por primera vez se realizó en la Ciudad de México y fue tanto el éxito que ahora hay quien propone que el Tianguis se alterne un año en Guerrero, donde nació; otro año en algún Estado y, después, en la CDMX, es decir, que se haga cada tres años en el, hasta ahora, estado más pequeño de la República.
XOCHIMILCO Y
SUS ENCANTOS
Y en esta gran fiesta del Tianguis Turístico también platicamos con el señor Gabriel Sandoval luego de participar en una conferencia acerca de la gobernanza de Xochimilco para crear cadenas productivas que den como resultado una experiencia agradable para los visitantes que, curiosos, llegan a la también llamada “Venecia Mexicana”.
Atraídos por los paseos en trajinera por alguno de los canales, los turistas pueden disfrutar desde un hermoso amanecer; de un atardecer espectacular; de un anochecer enigmático, acompañado de narración de leyendas, música, puestas en escena, observación de aves, paisajes naturales, explicación de lo que es el ajolote y lo que son las chinampas, que le valieron para que Xochimilco forme parte del Patrimonio Cultural Mundial de la Humanidad, un reconocimiento de la Unesco.
Explica que ya hay recorridos en el amanecer que inician a partir de las cinco de la mañana. El punto de encuentro es en el embarcadero de Belem (que cuenta con estacionamiento), para abordar un minubús que te llevará hacia un lugar llamado Los Sabios de Chililico y, posteriormente viajar en trajinera para navegar por los canales de Apatlaco, Texhuilo y canal de Japón donde se recomienda tomar fotos del lienzo de colores, la naturaleza, que se pinta de colores y que precisan de un ambiente tal que te lleva a la calma, a la reflexión, a pensamientos que cuestionan acerca de lo que es la vida.
Chililico o La Santísima es uno de los barrios originales y más antiguos del centro histórico de Xochimilco. Actualmente quedan muy pocos habitantes. Aunque se le considera una isla, técnicamente son tres chinampas interconectadas por tierra. Se dice que albergó la escuela a la que asistían las clases dirigentes del México-Tenochtitlán. A la llegada de los españoles, se cuenta, muchas esculturas de dioses y objetos prehispánicos fueron arrojados al agua. Cuenta la historia que cuando muere Cuitlapitoc (el líder de la zona) deja a Chililico, su hijo, como sucesor y es bautizado el día de San Santiago, por lo que recibe el nombre de Santiago Chililico.
Para tales experiencias se deberá hacer reservación pues, a veces, sólo son de temporada, como la llamada “Navegando con los muertos”, que es un recorrido en trajineras durante el cual se narran leyendas por personajes caracterizados como la Llorona, la Catrina o el Charro Negro y donde el costo incluye servicio de café y pan tradicional. Otro recorrido es el que se hace a la tenebrosa Isla de las Muñecas donde se cuenta la historia del por qué esa isla es tan especial.
Un producto más es el que se ofrece para festejar a cumpleañeros, novios, matrimonios y ¡hasta divorcios!, con la característica de que ponen el nombre personalizado a la trajinera; se adorna con globos y se acompaña con un grupo de marimba, mariachi, norteño, banda o trío a escoger. Cabe señalar que cada empresa que ofrece dichos servicios sale de diferentes lugares. ¿Te imaginas ser invitado a Xochimilco el día de tu cumpleaños y ver tu nombre escrito en la trajinera?
El señor Sandoval habla acerca de la comida típica: de la barbacoa; los tacos de carnitas; el chicharrón; las quesadillas de huitlacoche, flor de calabaza, las clásicas de queso, las de “asiento” (grasitas o residuos del chicharrón) o de guisados en general; las tortillas hechas a mano; las salsas verde, roja, el pico de gallo y el guacamole; del amaranto; los dulces cristalizados; el pulque, sus curados y el aguamiel; los atoles de diferentes sabores; los tamales de frijol, además del verde, rojo y rajas con queso.
Precisó don Gabriel que también se están promoviendo los lugares emblemáticos de Xochimilco; los personajes que allí han nacido; los compositores que, si bien se desconocen sus nombres, la letra de sus canciones y su música le han dado fama a México con las interpretaciones de, por ejemplo, Cielito Lindo, de Quirino Mendoza y Cortés, que han dado la vuelta al mundo.
PLANTAS EXOTICAS
MEDICINALES Y DEMÁS
Luego habló de los mercados de plantas donde existe una gran variedad de productos desde plantas de ornato, comestibles, medicinales y exóticas (como las carnívoras), hasta árboles, palmeras y otras donde abundan y son más solicitadas las rosas, los claveles, las margaritas, las dalias, las hortensias, las enredaderas, los cactus de diferentes variedades y especies, así como las de temporada como las flores de muerto (cempasúchitl), las nochebuenas y los pinos de navidad.
En dichos mercados también se ofrece la venta de tierra negra y de hoja; macetas; fertilizantes; semillas; pasto en rollo y artículos para la jardinería en general.
Resulta interesante saber más acerca de Xochimilco, la historia, las leyendas, usos, costumbres y la cultura en general, que envuelve este lugar situado al sur de la Ciudad de México.
