El gobierno de España, con Pedro Sánchez a la cabeza, respondió al de México a través de su ministro de Exteriores, José Manuel Albares quien después de señalar que las declaraciones del presidente López fueron “una sorpresa”, afirmó: “el Gobierno español no ha hecho ninguna acción que pueda justificar una acción de este tipo” pero defenderán los intereses de España ante cualquier país y circunstancia”.
Señaló que “la relación entre España y México es una relación estratégica que va más allá de declaraciones súbitas o palabras puntuales”, lejos de una pausa, pues las inversiones en ambas direcciones no paran de crecer en últimos años, lo cual considera que deben acompañar ambos gobiernos.
El Ministerio de Asuntos Exteriores “estudia el contexto de lo que ha dicho” López Obrador y “habrá respuesta en línea con el interés de España”.
