*Argumenta el Senado la Reforma a la Ley de Banxico
*Su Sustento: Beneficiará a las Familias de Migrantes
*En Bóvedas de los Bancos 1,000 Millones de Dólares
*Se Fortalecerán los Estrictos Controles Financieros
*Quienes Regresan al País, Traen Dinero en Efectivo
Por Joel Armendáriz
Frente a la polémica desatada por la reforma a la Ley del Banco de México salió a flote que su autonomía constitucional es un mito.
Los senadores de la República que aprobaron las modificaciones y enviaron a la Cámara de Diputados, se basaron en los dos párrafos segundo y tercero del artículo 28 que a la letra dicen: El Estado tendrá un banco central que será autónomo en el ejercicio de sus funciones y en su administración. Su objetivo prioritario será procurar la estabilidad del poder adquisitivo de la moneda nacional, fortaleciendo con ello la rectoría del desarrollo nacional que corresponde al Estado. Ninguna autoridad podrá ordenar al banco conceder financiamiento.
(…) El banco central, en los términos que establezcan las leyes y con la intervención que corresponda a las autoridades competentes, regulará los cambios, así como la intermediación y los servicios financieros, contando con las atribuciones de autoridad necesarias para llevar a cabo dicha regulación y proveer a su observancia (…).
Su concusión: La autonomía del Banco de México está acotada por la rectoría del desarrollo Nacional que corresponde al Estado, por las regulaciones que le establezca la ley y por la intervención de otras autoridades. Eso es un mandato constitucional, establecen en una declaración que circuló a fines de la semana pasada.
Sin embargo, es una interpretación sesgada del artículo 28. Salvo por la mención de…” fortaleciendo con ello la rectoría del desarrollo nacional que corresponde al Estado” no hay nada más que le reste la autonomía, que conforme a la afirmación, ha sido y es un mito “genial”.
De acuerdo con el comunicado “el mejor ejemplo de ello es la Comisión de Cambios, instancia fundamental para la definición de la política monetaria del país y el manejo de la reserva internacional, prevista en la Ley del Banco de México y que es presidida por el Secretario de Hacienda y Crédito Público y no por el Gobernador del Banco de México”.
LAS FALSEDADES SEGÚN SENADORES
Durante los días subsecuentes al 9 de diciembre, fecha en que el Pleno del Senado aprobó la reforma a la ley de Banxico, en términos generales las opiniones de expertos, banqueros, empresarios, instituciones financieras, entre otras, coincidieron en que al entrar en vigor las modificaciones se desprestigiará a la Institución, se correrá el riesgo de que adquiera dólares de procedencia ilícita y se perderá la confianza de inversores extranjeros y nacionales.
Los congresistas responden:
En un documento enviado a la Comisión de Hacienda del Senado, el Banco de México asegura que entre enero y septiembre del presente año, el monto de dólares no repatriados es solo de 102 millones de dólares y que por tanto es “marginal”.
Tal criterio es por decir lo menos, tramposo, pues se pone como ejemplo un periodo de solo 9 meses de un año atípico, caracterizado por la caída de los ingresos de dólares en efectivo por el turismo, actividad que ante los efectos de la pandemia se contrajo más de 50%.
En todo caso habría que agregar a ese monto los dólares que correspondan al último trimestre de este año, es decir, de octubre a diciembre.
Y agregar después los dólares no repatriados de los 8 años anteriores, desde 2012, cuando este problema comenzó a presentarse con mayor rigor. Más los que se acumulen.
Entonces quizá podríamos decir que de 2012 a 2020 tendríamos aproximadamente unos mil millones de dólares atrapados en las bóvedas de los bancos mexicanos.
Y ese es precisamente el problema que esta reforma busca resolver.
Y Banxico contrataca en voz de su gobernador, Alejandro Díaz de León quien sostiene que la reforma pone en riesgo la autonomía del instituto central al no contar con mecanismos que permitan la identificación de los dólares en efectivo que circulan en el país.
Mantiene su postura de no convertirse en el único “corresponsal” que opere los dólares no registrados en transferencias bancarias. Y coloca sobre el tapete las cifras: 99 por ciento de las remesas que llegan al país se hace a través de transferencias bancarias.
Sin embargo, el senador Alejandro Armenta, presidente de la Comisión de Hacienda, señala que los migrantes regresan con “millones de dólares” en efectivo en dos etapas del año: junio-julio y diciembre-enero.
Acusa el desconocimiento del Banco de México cómo en los estados expulsores de mano de obra y beneficiados por el efectivo que traen los connacionales, se encuentran sujetos a un mercado incontrolado porque los dólares que cambian les son comprados en 14, 15 o 17 pesos, lo que ocasiona que les den menos pesos de lo que vale la moneda estadounidense.
Luis Niño de Rivera, presidente de la Asociación de Bancos de México (ABM) se pronunció en contra de la reforma y, como el resto de los críticos, apunta que la autonomía del Banco Central está en riesgo.
Financieros, empresarios y opinólogos, enumeran algunas: El riesgo de que el Banco de México se pueda convertir en un intermediario en la repatriación de posibles recursos de procedencia ilícita afectándose su reputación. Falso.
La Iniciativa no contempla obligaciones al Banco de México de adquirir dólares sin controles ni revisión previa. Todo lo contrario.
Establece que las divisas que comprará el Banco serán solo las que deriven de operaciones vigiladas por la rigurosa aplicación del conjunto de disposiciones legales y normativas que permiten la estricta supervisión el sistema financiero mexicano y en particular de sus instituciones de crédito, por parte de la Comisión Nacional Bancaria y de Valores y de la Unidad de Inteligencia Financiera de la Secretaría de Hacienda y Crédito Público, particularmente en lo referente a la prevención del lavado de dinero y las operaciones con recursos de procedencia ilícita.
Desde el Consejo Coordinador Empresarial, con sus 12 agrupaciones, manifiesta su desacuerdo con la reforma y plantean el riesgo de que el Banco Central pierda respeto en el mundo financiero internacional.
El presidente López celebró la aprobación de los senadores y al conocer las críticas emitió su punto de vista: es una Ley y se tiene que acatar.
El pasado viernes en la Gaceta de la Cámara de Diputados no estaba enlistado subir al Pleno la reforma senatorial, pero probablemente entre sábado y hoy martes se haya concluido el proceso y a partir de la publicación en el Diario Oficial de la Federación será acto consumado.
Algunos constitucionalistas estimaron el fin de semana que el Banco de México y los organismos del sistema financiero podría recurrir a la controversia ante la Suprema Corte de Justicia de la Nación para garantizar el respeto a la autonomía de la institución.
