*Nada Bien el Nombramiento de Vargas
*Dos Bocas: el Nuevo Estanque de Paraíso
Por Jesús Michel Narváez
Pervertir la figura del “criterio de oportunidad” o lo que es lo mismo “testigo colaborador” y usarlo solamente cuando conviene al presidente de la República o a la Fiscalía General, podría terminar en un abuso de poder en contra de quienes no compartan la forma en que se gobierna.
La justicia debe aplicarse conforme el espíritu de la ley. No se negocia y tampoco se consulta.
La repentina aparición de Emilio Zebadúa, exoficial mayor de Sedesol y Sedatu cuando Rosario Robles encabezó ambas dependencias, en donde se tejió la conocida “Estafa Maestra”, para “declarar en contra de la que fue su jefa y del propio expresidente Peña Nieto”, fue considerada por el presidente López de “un asunto muy feo, muy bajo, porque se trata de vendettas; deja un ambiente de mucha descomposición; bueno, así estaban las cosas, así estaba de podrido”.
Es evidente que no le agradó que el chiapaneco llegara a la Fiscalía General de la República y anunciára que hablará en todos los idiomas y modismos para salvar su pellejo que, por cierto, está a punto de perder.
Deja de lado la “colaboración” de Emilio Lozoya que se acogió a la misma figura y desde su arribo a México, extraditado de España, el 17 de julio y desde entonces nadie lo ha visto. Vaya, ni los jueces que llevan el caso y que obliga al exdirector de Petróleos Mexicanos a firmar en el Reclusorio Norte cada 15 días.
El presidente sienta las bases para que el criterio de oportunidad solamente se aplique a quienes considere; no importa el peso del cargo que haya tenido quien se acoja a la figura sino qué puede aportar para terminar, según sus conocimientos, con los pesos pesados y no ir en contra de los de abajo que solamente reciben órdenes y están obligados a cumplirlas.
La aparición de Zebadúa, después de haber perdido tres solicitudes de amparo para no ser detenido toda vez que su nombre se menciona como operador financiero de Robles Berlanga, preludia el crecimiento del escándalo y todo apunta hacia el expresidente Peña, con lo cual se desvirtuaría la versión de que entre su sucesor y él había un pacto para no ser tocado ni con el pétalo de una rosa.
El presidente insiste en que no le corresponde juzgar a sus antecesores sino a los ciudadanos dando a entender que la consulta popular, programada para el primero de agosto de 2021, no es para saber si se lleva a la justicia a “los actores políticos del pasado”, sino a los expresidentes desde Salinas hasta Peña Nieto.
Eso es falso de toda falsedad. Él hubiera querido que en la pregunta aparecieran los nombres, pero la Suprema Corte de Justicia Declaró Inconstitucional el contenido de la misma y la reformuló. Así que no se preguntará si se quiere llevar a la justicia a quienes gobernaron este país durante 30 años.
Cuando advierte que el caso de Zebadúa huele mal y se trata de una vendetta, no aclara en que sustenta su dicho y tampoco la razón para enviar el mensaje a la Fiscalía que, más claro no puede ser: el exfuncionario no obtendrá el beneficio de ser testigo protegido. Al menos eso se desprende de sus palabras.
Probablemente la figura sea funcional en materia de narcotráfico, porque a quienes se acusa en las declaraciones y de quienes se aportan pruebas son personajes del crimen organizado que tienen a sus servicios ejército de sicarios que están más que dispuestos a jalar el gatillo para liquidar a los “soplones”.
Si se trata de delitos de corrupción, la Fiscalía debe investigar, allegarse pruebas sólidas y desde ahí iniciar el procedimiento legal. Nadie garantiza que los soplones aporten elementos contundentes que por primera vez en México lleven a la cárcel a quienes cruzaron la banda tricolor sobre sus pechos.
METEORITOS
José Luis Vargas Valdez es el nuevo presidente del Tribunal Electoral del Poder Judicial de la Federación. Su nombramiento ha sido bien recibido y desde todos los frentes políticos se lanzan obuses que están dando en el blanco. Saber cómo se hizo del cargo disiparía muchas dudas. El problema es que quienes afirman saber las razones de su ascenso, son ampliamente conocidas. Y si son veraces, el TEPJF sigue el camino que marcan en Palacio Nacional: va rumbo al despeñadero. ¿Cuál es la razón de destrozar el sistema judicial en materia electoral? No se advierte la defensa por parte del ministro presidente de la Corte, Arturo Zaldívar Lelo de Larrea. *** La fecha fatal para que los diputados federales aprueben el Presupuesto de Egresos de la Federación para el ejercicio de 2021 vence el 15 de este mes. Es decir, el próximo domingo como lo mandata la Constitución. De ahí la urgencia de los gobernadores que conforman la Alianza Federalista de reunirse con el secretario de Hacienda, Arturo Herrera Gutiérrez, pero al cierre de esta columna –viernes 6- no se había concretado la cita. Y es que el presidente López aventó la pelota hacia la cancha del responsable de las finanzas públicas y le ordenó resolver el tema. No se sabe si escuchando a los gobernadores o siguiendo las instrucciones forjadas al calor de las palabras del No Hay, el personaje de Héctor Suárez.
BRILLA EL SOL
Con objetividad hay que decirlo: Manuel Bartlett Díaz, director general de la Comisión Federal de Electricidad no es culpable de que la presa Peñitas, ubicada en Tabasco, tenga que abrir sus compuertas cuando el caudal de líquido rebasa la capacidad. Ciertamente, habría que revisar porque cuando se construyó, en 1987, no se previó hacerla como se hizo en Chicoasén: con represas. Eso es asunto del pasado. *** La multiplicación de contagiados en el Senado de la República merece encontrar a quien fue el primer portador del Covd-19 y más aún revisar con lupa si en la parte administrativa se cumplieron las órdenes de sanitización. No es asunto menor que cuando menos una docena de legisladores hayan sido vencidos por el virus. *** En los círculos políticos se comenta que en cuanto Rosa Icela Rodríguez asuma el cargo de secretaria de Seguridad y Protección Ciudadana aflorarán “irregularidades” cometidas en los 20 meses que estuvo al frente Alfonso Durazo. Sin embargo, nadie apuesta a que se ventilen antes de las elecciones estatales de Sonora para darle oportunidad al exfuncionario de “ganar” –si es que el voto lo favorece- el gobierno. Son comentarios imposibles de comprobar.
CHOQUE DE METEOROS
Parece ser que a Isidro Labrador no le interesa que la refinería Dos Bocas avance en tiempo y forma y por ello le abre la llave desde el cielo para demostrar que los expertos en la materia tienen razón y que Paraíso, en Tabasco, no es el lugar en donde se debe construir. Huracanes, tormentas tropicales y frentes fríos han inundado el polígono en donde se edifica lo que algún día será, si es que llega esa fecha, la séptima refinería de México.
Además, hay que apuntar que el costo estimado y aprobado para Dos Bocas consideraba 8 mil millones de dólares como máximo y ya desde ahora se amplió el presupuesto en 900 millones. Gasto que justificó con amplitud la secretaria de Energía, Rocío Nahle. ¿Finalmente cuánto costará? Claro, si es que las inundaciones, llamadas “espejos de agua”, permiten los trabajos.