*Lucha por Dirigir Morena Será de dos: Mario y Porfirio
*Bonilla y la Estrategia del Avestruz: Oculta al “Sucesor”
Por Gerardo Lavalle
A.- A temblar.
Sí, con la decisión de la Suprema Corte de Justicia de la Nación de declarar constitucional la consulta para juzgar a cinco expresidentes: Carlos Salinas de Gortari, Ernesto Zedillo Ponce de León, Vicente Fox Quesada, Felipe Calderón Hinojosa y Enrique Peña Nieto, el circo se completó y el pulgar señala hacia abajo por lo que los tigres y leones disfrutarán de carne y sangre, mucha sangre. Y aunque la pregunta fue reformulada para impedir la “violación del debido proceso” y ahora es “genérica” según el presidente de la República, la consulta va porque va y punto.
Probablemente la acusación de empobrecer al pueblo no avance. No es un delito tipificado por el Código Penal Federal (sic) –como lo llama el Diario Oficial de la Federación- y por tanto solamente se pondrá en entredicho la calidad humana del expresidente Salinas.
Para Zedillo el panorama es menos desfavorable. Heredó una economía “colgada con alfileres”, propuso y obtuvo la creación del FOBAPROA y se convirtió en el presidente la democracia al mantener “la sana distancia con su partido” y entregar la banda presidencial a un opositor.
Foz, en cambio junto con Calderón, tienen mucho que perder y nada que ganar. El primero porque no ha soltado al presidente López con adjetivos en ocasiones impronunciables; el segundo, porque en palabras del habitante de Palacio Nacional, le “robó” la elección en 2006.
Y de Peña se tienen dudas: ¿hay o no un pacto de impunidad?… ¿el acuerdo está o no vigente?
Con la eliminación de los nombres de los expresidentes en la pregunta para la Consulta, habrá quienes no recuerden a Zedillo o pasen por alto a Fox. Los inolvidables de siempre: Salinas y Calderón.
La actuación de los cabilderos presidenciales sin duda debe ser reconocida. Porque a pesar de las opiniones en contra de la Consulta y de la pregunta, finalmente el ministro presidente de la Corte abrió la puerta para que se avalara y reconociera la constitucionalidad. No es regla escrita pero el voto de quien presidente la Corte se conoce al final de la votación. Hay una razón de peso: si hay empate el voto es de calidad y con él se resuelven los asuntos aunque no sean trascendentales.
El asunto está consumado. Ahora el pueblo sabio y bueno podrá demostrar su sabiduría y llevar ante las autoridades correspondientes sus acusaciones. Ah, no hay que olvidar que la Consulta se realizará el primer domingo de agosto y no en junio como lo proponía el presidente.
Como se le quiera mirar, la decisión de la Corte resultó una nueva bocanada de oxígeno para el Presidente, que tendrá materia de conversación, de monólogo, durante un largo tiempo.
B.- A Morena no se le dan las cosas como se planean desde arriba. Conocidos los nombres de aquellos y aquellas que quieren dirigir al partido oficial, el desencanto se presentó con nuevas expresiones.
Mario Delgado, Porfirio Muñoz Ledo, Yeidckol Polevnsky, Hilda Mirna Díaz Caballero y Adriana Menéndez, es la quinteta avalada por las encuestas y que el Instituto Nacional Electoral avaló.
A Delgado se le ha venido el mundo encima por el cúmulo de señalamientos formulados no solamente por Muñoz Ledo sino por una veintena de sus pares en San Lázaro que lo obligaron a rendir cuentas de los recursos que ha manejado en estos dos años de la LXIV Legislatura. Y además, el reclamo del interino de Morena, Alfonso Ramírez Cuéllar de que el INE fiscalice los recursos gastados en las campañas, porque hay campañas, de los aspirantes. El mensaje dirigido abiertamente a Delgado.
Por ello y para quedar bien con el padrino de padrinos, apresuró el paso para mostrar el control que tiene y satisfacer la orden presidencial de desaparecer 109 fideicomisos que le darán a la Secretaría de Hacienda el manejo de unos 68 mil millones de pesos (la cifra varía conforme van estudiando los fideicomisos, porque los extinguieron sin saber cómo se manejaban y a quienes beneficiaban). Pero las oposiciones y aliados hicieron el vacío y se rompió el quorum y Delgado no pudo darle dos pasteles de regalo al Presidente. Será este miércoles cuando lo intente de nueva cuenta.
De acuerdo con el pulso de expertos demoscopistas, la pelea por la presidencia nacional de Morena estará entre Delgado y Muñoz Ledo. El primero afirma que no es títere de Marcelo Ebrard y que tiene una carrera política desarrollada por sí mismo. Es decir, no necesita vejigas para nadar. El segundo es el más político, quizá el mejor preparado y ciertamente el que no tiene nada que perder.
Su postura obedece a la convicción de que en Morena no se ha entendido lo que es la cuarta transformación e incluso hay quienes la atacan soterradamente para impedir que los propósitos se alcance. Su choque frontal con el canciller Ebrard ha hecho que éste pierda por momentos el control, algo no usual en su conducta política.
Y de Yeidckol ya mejor no hablar. Simplemente hay que decir que no cuenta con la alineación de los astros que declararse vencedora.
C.- Después del fracaso por ampliar el mandato para el que fue elegido, Jaime Bonilla, gobernador de Baja California, parece haberse desinflado.
Sin embargo, tiene metidas las manos hasta los codos en cuanto a quien podría ser su sucesor.
Lleva a cabo una estrategia de avestruz y ha orillado a quienes buscan vivir en Mexicali que escondan no solamente la cabeza sino las intenciones hasta don Jaime decida cuál es el momento de salir a la palestra.
A Bonilla le quedan escasos dos meses para avalar al que se convertirá en el segundo gobernador de Morena en Baja California, si el candidato del PAN no se viste de diablo y le mete un susto a los guindas.
Por lo pronto, Bonilla abre frenes y coloca sobre el fuego demasiados fierros que, de no tener cuidado, pueden quemarlo y de manera que requiera cirugía plástica.