Amnistía Internacional (AI) pidió este miércoles a la Cámara de Diputados que llame a comparecer al secretario de Hacienda, Arturo Herrera, por los recortes al presupuesto del Instituto Nacional de las Mujeres (Inmujeres).
«Las y los diputados deben ejercer su facultad de vigilancia y llamar a comparecer al Secretario de Hacienda y Crédito Público, para que rinda cuentas sobre los recortes presupuestarios ordenados por el Ejecutivo federal», aseveró la organización en un comunicado.
Argumentó que estos recortes son contrarios a la Ley Federal de Presupuesto y Responsabilidad Hacendaria, que establece claramente que «no se podrán realizar reducciones a los programas presupuestarios ni a las inversiones dirigidas a la atención de la igualdad entre mujeres y hombres».
La semana pasada, la junta de Gobierno aprobó una reducción del 75 % en el presupuesto del Inmujeres, equivalente a 151.9 millones de pesos (6.8 millones de dólares).
El recorte es consecuencia del decreto publicado el pasado 23 de abril por el Gobierno federal en el que se anunciaban fuertes ajustes a los gastos de ciertas áreas de Gobierno a causa de la crisis por COVID-19.
AI denunció que el Ejecutivo federal pasó por alto las facultades que tiene en este caso la Cámara de Diputados, pues la citada ley precisa que cualquier cambio en el ejercicio del presupuesto «debe ser aprobado por las y los diputados».
Entre las reducciones, se pretendió recortar los recursos de las Casas de la Mujer Indígena y Afrodescendiente y el presupuesto que asigna la Comisión Nacional para Prevenir y Erradicar la Violencia Contra las Mujeres para implementar las recomendaciones de las Alertas de Violencia de Género.
Estos recortes han sido negados por el Presidente Andrés Manuel López Obrador, quien ha dicho que su Gobierno no ha recortado ayudas contra la violencia de género.
«Nosotros no tenemos ningún ajuste en el programa federal para lo que tiene que ver con la defensa de los derechos humanos», aseveró el Mandatario el pasado martes en su conferencia matutina pese a que ha hecho numerosos recortes en el gasto público para cumplir con su plan de «austeridad republicana».