*El Gobierno de un Solo Hombre, una Realidad
*Cuatro Gobernadores de Morena y la Represión
Por Gerardo Lavalle
A.- Bajo el lema de ahí viene el lobo… ahí viene el lobo y nadie lo creyó cuando finalmente llegó tomó por sorpresa a todos los confiados en que su ausencia sería permanente.
Desde meses atrás, allá por mayo de 2019, los especialistas en la materia preludiaban un crecimiento del PIB mexicano poco más que magro. Vaya, sin un centímetro de grasa. Pero los siempre optimistas le dijeron al pueblo: “vamos requetebíen” y con eso hubo conformismo.
Pero el lobo sigo al acecho.
Y tomó no por sorpresa porque en el Gobierno federal hay quienes sí saben de economía, aunque no se atrevan a decirle al jefe que el aullador se acercaba con más velocidad que precaución.
Finalmente, al cierre de febrero dos instituciones mexicanas que gozan –todavía- de credibilidad y prestigio reconocieron que el mamífero placentario del orden de los carnívoros ya está demasiado cerca y en cualquier momento atacará a sus indefensas víctimas (léase las mayorías que habitan este país llamado México).
La atonía que registra la economía muestra el otro lado de la moneda: mientras no exista ESTADO DE DERECHO y el gobierno no disperse los recursos en diferentes obras de infraestructura y no solamente invierta en los proyectos personales: Tren Maya, Aeropuerto de Santa Lucia y Dos Bocas, ésta destinada a naufragar literalmente por la zona en donde se construye, el freno seguirá haciendo estragos y ni El Salvador logrará el milagro de la reactivación.
Cuando personajes como Carlos Slim, osado en sus inversiones, reclama iniciar a la voz de ya obras importantes, es que no todo marcha sobre rieles, aunque sea un defensor de la política presidencial.
Los empresarios, siempre prestos a acudir a Palacio Nacional y comer tamales de chipilín con chocolatito caliente y son colaboradores en la rifa-no rifa del avión presidencial, ellos contestan dando atole y no con el dedo sino cerrando sus chequeras y llevándose sus recursos al extranjero, como lo ha documentado el propio Banco de México.
Nadie sabe cuánto más aguantará la liga sin romperse. Pero de que el lobo está por llegar para ingerir sus “sagrados alimentos” y no necesariamente franciscanos, no hay la menor duda.
Las bolsas en el mundo caen aceleradamente por el coronavirus y la Organización Mundial de la Salud advierte el riesgo de una inminente pandemia, aquí desde las esferas del poder público responden: la advertencia es para África… que se preocupen los africanos. Ignoran que en San Luis Potosí el COVID-19 ya cobró su primera víctima; Europa y el Medio Oriente sufren las consecuencias y la vacuna tardará cuando menos 18 meses en estar lista.
Aquí no pasa nada. Se presume que el COVID-19 les pegará a los países que no tienen un “robusto sistema de salud” y se presume que México si cuenta con él. Hay que preguntar a los pacientes que no reciben medicamentos y que por una simple gripa convertida en neumonía fallecen.
El lobo no viene solamente por dinero. Devorará todo lo que se le ponga enfrente y demostrará que sus colmillos están más afilados que los de un pequeño pejelagarto.
Es mejor creer que está por llegar y no suponer que se trata de una broma de mal gusto, de un chistorete que no hace reír a nadie.
B.- Durante una charla con Mauricio Tabe, presidente de la Junta de Coordinación Política del Congreso de la Ciudad de México, surgió un planteamiento que merece ser analizado: la Jefa de Gobierno, Claudia Sheinbaum no corrige las acciones en las que el Presidente se equivoca sino que las replica con los mismos nulos resultados.
Aunque el Presidente refute a The Wall Street Journal respecto de que en México los gobiernos de un solo hombre los representaron Antonio López de Santa Anna (Antonio de Padua María Severino López de Santa Anna y Pérez de Lebrón) y Porfirio Díaz (José de la Cruz Porfirio Díaz Mori) su argumento cae por su propio peso. Un Estado Democrático es aquel en el que los pesos y contrapesos impiden el abuso de poder. Si alguien estima que actualmente hay independencia en los Poderes de la Unión, que revise el actuar del Legislativo y el Judicial.
Cierto que el Judicial no funciona como contrapeso, pero sí para frenar las decisiones que violenten el ESTADO DE DERECHO y rompan los preceptos constitucionales bajo el argumento de que se hace en base a “un bien mayor”. Pero el Legislativo sí es un contrapeso que tiene por obligación constitucional preservar la equidad en las leyes y no fabricar a modo las que el Presidente quiera.
Y no, no se trata de ser “conserva” –ya le quitó el vocablo tres letras al verbo- o adversario fifí, sino de llamar las cosas por su nombre.
C.- Cuatro gobernadores de Morena: Adán López Hernández (Tabasco), Cuitláhuac García (Veracruz), Miguel Barbosa (Puebla) y Rutilio Escandón (Chiapas) han mostrado que la “represión legítima” sí se vale.
En Tabasco se impide la libertad de expresión –con la Ley Garrote- mediante sanciones sumamente severas a quienes protesten en las obras públicas; Veracruz se lanza contra médicos y enfermeras que exigen medicamentos; Puebla experimenta la “mano dura” contra los grupos políticos mientras la violencia avanza sin que nadie la frene y en Chiapas se reprime a los estudiantes que protestan por no ser escuchados.
Parece ser el sello de la casa guinda. Como decían los bisabuelos españoles: cada pueblo tiene el gobierno que se merece.
Y que lo diga.