El cineasta mexicano Alejandro González Iñárritu, ganador del Oscar por la película Birdman, recibió el Doctorado «Honoris Causa» por parte de la Universidad Nacional Autónoma de México (UNAM).
La ceremonia de investidura en la que se le otorgó el reconocimiento al realizador de filmes como Amores perros y Babel por su arte cinematográfico, se llevó a cabo este jueves en la Sala Nezahualcóyotl del Centro Cultural Universitario.
Un día antes, el cineasta dictó una conferencia magistral para estudiantes de la Escuela Nacional de Artes Cinematográficas (ENAC), en la que compartió sus experiencias como director de cine y los retos a los que se ha enfrentado en la industria.
Además de González Iñárritu, también fueron reconocidos con esta distinción Alicia Bárcena Ibarra, Julia Carabias Lillo, Rolando Cordera Campos, José Antonio de la Peña Mena, Donald Bruce Dingwell, Vincenzo Ferrari, María Elena Medina-Mora Icaza, Roberto Meli Piralla y Sandra Moore Faber.
El reconocimiento fue otorgado a personalidades nacionales y extranjeras con méritos excepcionales, que, “con sus contribuciones a la pedagogía, las artes, las letras y las ciencias han ayudado a mejorar las condiciones de vida y el bienestar de la humanidad”.
Antes de que comenzara la ceremonia se guardó un minuto de silencio en memoria de los 43 alumnos de la Escuela Normal Rural «Raúl Isidro Burgos» de Ayotzinapa, desaparecidos el 26 de septiembre de 2014 en Iguala, Guerrero.
“Les solicito ponernos de pie y guardar un minuto de silencio en solidaridad con el esclarecimiento de los acontecimientos ocurridos hace cinco años en Iguala, Guerrero; la localización de los estudiantes y una correcta intervención”, pidió el secretario General de la Universidad Nacional Autónoma de México (UNAM), Leonardo Lomelí Vanegas.
Hace cinco años, los jóvenes normalistas viajaron de Ayotzinapa, Guerrero, a la ciudad de Iguala, con la intención de tomar autobuses para trasladarse a la Ciudad de México y participar en la marcha que cada año se lleva a cabo para conmemorar la matanza estudiantil de 1968.
Pero durante la noche del 26 de septiembre y la madrugada del día 27, las policías municipal de Iguala y estatal de Guerrero los persiguieron y los atacaron, acusándolos de haber tomado de manera ilegal los camiones. Como resultado de esto, 43 estudiantes desaparecieron y 27 más quedaron heridos.