La Dra. Elena Azaola Garrido, investigadora del centro de investigaciones y estudios superiores en antropología social (CASEDE) dijo en entrevista que no se debe mezclar moral con religión, en relación a cartilla moral de AMLO y puntualizó: “Yo considero que es muy benéfico, adecuado promover valores morales, que son muy importantes para la sociedad, especialmente en un momento donde vivimos tanta violencia, de inseguridad, con tantas víctimas y eso rompe los lazos sociales, promueve la desconfianza en lugar de la solidaridad y la búsqueda del bien común y una serie de valores que es importante promover”.
Sin embargo, es diferente a que esos valores morales, sean promovidos por determinado grupo religioso y ahí si no hay que mezclar porque la moral es una cosa y tiene que ver con esos valores que también nos hacen respetar las leyes y las normas de convivencia social, el bienestar de todos.
Y que quede muy claro la religión es un asunto de cada persona, debe de haber libertad de creencias, libertad de culto, libertad de las religiones que sean y no podemos mezclar una cosa con la otra y se tiene que ampliar el mensaje de que se tiene esa libertad de conciencia, esa libertad de culto, si bien que bueno que promovamos los valores morales, pero no hay que confundir una cosa con otra.
Al principio hablaban de Constitución Moral y que bueno que lo cambiaron a cartilla moral, sabemos que la Constitución es la más alta ley de nuestro Estado, entonces está bien que lo cambien a cartilla y digan este es nuestro ideario y los valores por los que luchamos, los valores que quisiéramos ver en nuestra sociedad, porque esos son los valores que van a guiar la conducta de este Gobierno y que inviten a sumarme a la sociedad a valores que son positivos para todos.
Pero estos valores no se pueden de ninguna manera imponer como los únicos, o como si hubiera una sola conciencia, lo que, si me parece un exceso eso de 120 millones de cartillas, por lo que hay que hacer un llamado al respeto de la libertad de culto, de creencia, de defender la creencia individual.
Difundir valores es bueno, pero no es correcto imponer una forma de pensar, no podemos imponer una creencia, por eso existe el libre albedrio, ahora difundir ideas religiosas tampoco es compatible con un estado laico, que es el que defiende nuestra Constitución.
Si se desviara la cartilla moral hacia algo religioso no lo vería políticamente correcto, mientras sea el reparto de un documento no pasa a mayores, pero que no se aproveche la oportunidad para defender las creencias religiosas y conciencia.
Que quede claro que el Gobierno no se puede asociar con ninguna religión, sino defender la libertad de culto.