Luego de los resultados de la primera compra consolidada de medicinas y material de curación en que 62 por ciento de las claves se declararon desiertas, las secretarías de Salud (Ssa) y de Hacienda y Crédito Público (SHCP) afirmaron que el proceso “resultó conforme a lo planeado”.
En un comunicado conjunto emitido esta noche, señalaron que “hay resistencias naturales al nuevo modelo de compra del gobierno de México” e insistieron en que el abasto de medicinas está garantizado.
Sin mencionar las cifras que dan cuenta de que la mayoría de los licitantes optó por no presentar ofertas económicas, las dependencias dijeron que la licitación es “un primer ejercicio para construir el nuevo modelo de compras consolidadas”.
Subrayaron que el proceso concluido el pasado viernes implicará una inversión cercana a 7 mil millones de pesos, que representan un ahorro de más de mil millones. Es decir, es un ahorro de 20 por ciento respecto de lo adquirido en 2018, aunque omite mencionar que todavía falta agregar el costo que tendrá el almacenamiento, traslado y distribución de los insumos adquiridos.
Respecto a las claves que quedaron desiertas indicaron que la razón es que no presentaron proveedores o lo hicieron con precios mayores a los de referencia. Al respecto, integrantes de la industria farmacéutica señalaron que los precios máximos de referencia establecidos por el gobierno “ya no son negocio. Todas ya se ubicaron por debajo del costo de producción y nadie va así, porque es perder dinero”.
Las dependencias federales también reiteraron que los precios de referencia se fijaron con base en una investigación de mercado internacional con la asesoría permanente de la Oficina de las Naciones Unidas de Servicios para Proyectos (UNOPS), organismo de la ONU especializado en compras gubernamentales.
Tal como lo informaron desde el pasado viernes, en el nuevo comunicado la Ssa y SHCP reiteraron que no habrá desabasto de medicinas ni materiales de curación, radiológicos y de laboratorio, incluidos en la compra consolidada, porque están vigentes contratos suscritos el año pasado, los cuales concluyen el 31 de diciembre.
Aunque señalaron que es posible realizar adjudicaciones directas, no detallaron cuáles y cuántas entidades federativas comprarán los insumos médicos por esta vía y cuál es el monto que se gastará.
Finalmente, reconocieron “a los proveedores que decidieron trabajar y contribuir a la transformación del país”, con base en los ahorros que requiere el gobierno federal.
