Por Itzel Toledo García
Neoyorquina de nacimiento y de origen puertorriqueño, licenciada en Relaciones Internacionales y Economía por la Universidad de Boston, educadora y activista política, Alexandria Ocasio-Cortez (AOC, 13 de octubre de 1989) es una latina miembro de los Socialistas Democráticos de América. Desde el 3 de enero ejerce como representante del Partido Democrático en el Congreso por parte del 14º Distrito Congresional de Nueva York, siendo la mujer más joven en tener dicho cargo en la historia de los Estados Unidos.
En su campaña, AOC se comprometió a luchar por la justicia social, económica y racial: “Ocasio2018 es una campaña que une a los neoyorquinos para luchar por las necesidades de las familias de clase trabajadora en el Bronx y Queens. Juntos vamos a crear una nación con asistencia sanitaria, educación universitaria gratuita, empleos de calidad y justicia para todos.” (https://ocasio2018.com/) En su campaña se incluyeron consideraciones importantes como desarrollar mecanismos que ayuden a las personas a tener una vivienda estable con referencia a renta y costo de vida en Nueva York; luchar por un sueldo igualitario y seguridad en el espacio laboral para las mujeres; promover la legalización federal de la marihuana; fomentar la garantía de empleo federal; reformar el sistema judicial, entre otros. Además, destacó que para un mejoramiento de la situación de los neoyorquinos “hay que acabar con la supremacía y la corrupción del gran capital”. Por lo mismo, AOC solamente aceptó donaciones del público y no de corporaciones o de Comités de Acción Política.
En lo que va del 2019 AOC se ha mantenido en el centro del huracán político en los Estados Unidos, pues su crítica al presidente Donald Trump y al statu quo económico, político, racial y ecológico ha causado gran revuelo, tanto en los medios tradicionales como en los medios sociales. La opinión pública estadounidense ha destacado su posición progresista y su participación en temas como la investigación de los negocios de Trump y el pago de impuestos; su decisión de establecer mejores salarios para los miembros de su equipo; su cuestionamiento sobre la existencia de billonarios –lo que considera un fracaso político-, su apoyo a un Nuevo Pacto Verde (Green New Deal), entre otros.
Ahondemos en una de las propuestas más interesantes en las que ha participado Ocasio-Cortez: el Green New Deal. En febrero el senador Ed Markey (Massachusetts) y AOC presentaron una resolución reconociendo el deber del Gobierno Federal estadounidense de crear un Nuevo Pacto Verde frente al cambio climático, causado en su mayoría por la actividad humana en el último siglo. Tal cambio, explica la resolución, ha implicado el aumento de los niveles del mar, incremento de incendios forestales, sequías, y otros eventos que afectan la vida humana todo el mundo. Se trata de un programa que se propone bajar las emisiones de carbón, para 2030, entre 40 y 60% del nivel de 2010 y neutralizar el efecto invernadero para 2050, lo cual pondría a Estados Unidos a la vanguardia mundial frente al cambio climático y evitaría migraciones masivas de las regiones más afectadas y más desastres naturales como la pérdida del 99% de los corales.
Esta propuesta llama a establecer y mejorar métodos para generar electricidad sustentable, por ejemplo modernizando los edificios de todo el país para que tengan una utilización eficiente de energía y agua; eliminar la contaminación y la emisión de gases de invernadero de manufacturas e industria como sea posible tecnológicamente; trabajar de manera colectiva con granjeros y agricultores para eliminar la contaminación y la emisión de gases de invernadero de este sector tanto como sea posible; mejorar la infraestructura al proyectar un aumento del transporte público y la construcción de vehículos eléctricos. Además, considera la necesidad de establecer un sistema que logre el acceso universal a aire limpio, a comida saludable y a agua potable, y que permita el acceso a la naturaleza y a un ambiente sustentable.
Este pacto incluye una dimensión económica que busca permitir nuevamente la movilidad socioeconómica en la sociedad estadounidense al incrementar el salario por hora, asegurar la prosperidad y la seguridad económica y atacando las históricas injusticias sistémicas que han oprimido a indígenas, comunidades de color, comunidades de inmigrantes, zonas rurales con poca población, comunidades desindustrializadas, a los pobres, a los trabajadores con bajos salarios, a las mujeres, a las personas mayores, a las personas sin vivienda, a las personas con discapacidades y a la juventud.
Esta resolución, así como la activa participación de AOC en distintos debates desde que comenzó 2019 han llevado a una fuerte crítica a su persona, sobre todo desde la derecha conservadora, que la observa como una amenaza socialista para el sistema político estadounidense y aprovecha cualquier oportunidad para burlarse de ella. Hay quien la considera falta de educación a pesar de que se graduó cum laude en la Universidad de Boston, como el telepredicador Pat Robertson; quien la compara con una adorable niña de cinco años, como el comentarista de Fox News Brit Hume; y quien la caracteriza como chiflada (looney), como es el caso del ex gobernador Mike Huckabee. Ante este tipo de comentarios, Ocasio-Cortez señaló en entrevista con The New Yorker : “La idea de que una mujer sea tan poderosa como un hombre es algo con lo que nuestra sociedad no puede lidiar, pero soy tan poderosa como un hombre y eso los vuelve locos.” (Alexandria Ocasio-Cortez en entrevista con David Remnick, The New Yorker, 3 de marzo de 2019, https://www.newyorker.com/news/daily-comment/alexandria-ocasio-cortez-is-coming-for-your-hamburgers)
Sin lugar a dudas, Alexandria Ocasio-Cortez encarna al otro dentro del sistema político estadounidense y frente a Donald Trump: es una mujer latina joven y crítica del statu quo. Desde enero ha demostrado una alta capacidad para modelar la agenda política estadounidense, para mover un poco el centro de atención política de la figura de Trump y tomar en cuenta la preocupación compartida por los sectores vulnerables, tanto en Estados Unidos como alrededor del mundo: la crisis climática, la falta de seguridad laboral, la injusticia social, etc. En las últimas encuestas de popularidad, AOC mantiene una visión positiva entre mujeres, jóvenes y personas de color. Es una esperanza joven para socialdemócratas estadounidenses que en los últimos años han encontrado en Bernie Sanders una opción. Además, forma junto a Ilhan Omar -representante por el 5º Distrito Congresional de Minnesota desde enero de 2019, siendo la primera mujer de confesión musulmana y de origen somalí naturalizada estadounidense en ocupar dicho cargo- una mancuerna de alteridad que representa una amenaza a la hegemonía de los acuerdos bipartidistas en el país.