Luego de un grupo de encapuchados ocasionó daños a establecimientos, comercios durante la noche del pasado 26 de septiembre en la que se recordó la desaparición de los estudiantes de Ayotzinapa, fueron movilizadas barreras de contención al interior de Palacio Nacional –recinto que también sufrió afectaciones en dicha ocasión– para usarse en caso de registrarse actos similares en la marcha programa para este 2 de octubre, en el marco del aniversario de la matanza de Tlatelolco en 1968.
Se trata de puertas de acero de aproximadamente cuatro metros de altura en total, cuentan con poleas para regular la altura de su parte superior y con llantas para movilizarlas de manera rápida.
La protección se usaría en las puertas del recinto, mismas que datan de mediados del Siglo XIX. De utilizarse, representaría la primera ocasión que se blindaría Palacio Nacional en la actual administración federal.
También se dispusieron extintores de alta capacidad en las puertas aledañas a la plancha del Zócalo capitalino.
Durante la marcha por Ayotzinapa la semana pasada, encapuchados abollaron a martillazos y pintaron con aerosol la puerta mariana de Palacio Nacional, con 167 años de antigüedad, misma que comenzó a ser reparada desde el mismo día de la marcha para evitar daños permanentes.