
En un comunicado recogido por The Times of Israel, el Gobierno afirmó que las Fuerzas de Defensa de Israel (FDI) recibieron instrucciones de Netanyahu y del ministro de Defensa, Israel Katz, para intensificar los ataques con el objetivo de desmantelar la infraestructura militar y política de Hamás, además de asegurar la liberación de los rehenes israelíes.
“A partir de ahora, Israel actuará contra Hamás con una fuerza militar cada vez mayor”, señaló la oficina del primer ministro, que confirmó que la cúpula política aprobó la reanudación de las operaciones militares la semana pasada.
Ante la reanudación de los ataques, el Comando del Frente Interno de las FDI anunció la suspensión de las clases en las ciudades israelíes cercanas a la frontera con Gaza.
La oficina del primer ministro, Benjamín Netanyahu, anunció que el Ejército recibió órdenes de desmantelar la infraestructura militar y política de la organización extremista, así como de garantizar la liberación de los rehenes israelíes
Las directrices se actualizaron debido al regreso de las operaciones militares durante la noche. En las regiones occidentales del Néguev y del oeste de Laquis, las restricciones permanecen sin cambios.
Los bombardeos se producen tras casi dos meses de cese al fuego en la guerra de 17 meses, en los que decenas de rehenes fueron intercambiados por cerca de 2.000 prisioneros palestinos.
Este lunes, Israel llevó a cabo bombardeos en la Franja de Gaza, el sur de Líbano y el sur de Siria. Las Fuerzas de Defensa afirmaron que los ataques estaban dirigidos contra militantes que planeaban atentados.
El ejército israelí declaró que los ataques tenían como objetivo centros de mando militar y sitios con armamento pertenecientes a las fuerzas del dictador Bashar al-Assad, argumentando que representaban una amenaza para Israel.