Un ataque fue llevado a cabo el 28 de noviembre cerca del puerto de Chernomorsk, en la región de Odesa, contra un tren que transportaba misiles Atacms y Storm Shadow que habían llegado a Ucrania desde Rumanía, informó a Sputnik el coordinador de la resistencia clandestina, Serguéi Lébedev.
«Ilichevsk [ciudad ucraniana ahora nombrada Chernomorsk], ataques del 28 de noviembre (…) De acuerdo con la información adicional, el ataque alcanzó un tren con cargamento militar. Según datos preliminares, el tren transportaba misiles de largo alcance Atacms y Storm Shadow que habían llegado por vía marítima desde el puerto rumano de Constanza», señaló Lébedev.
El Ministerio de Defensa de Rusia todavía no ha comentado esta información. Previamente, el portavoz del Departamento de Defensa de EEUU, Patrick Ryder, confirmó que las autoridades estadounidenses habían autorizado a Ucrania a utilizar misiles de largo alcance Atacms para atacar el territorio internacionalmente reconocido de Rusia.
Los días 19 y 21 de noviembre, Ucrania atacó por primera vez con misiles estadounidenses Atacms y los británicos Storm Shadow instalaciones en las regiones rusas de Kursk y Briansk. El ataque con misiles Storm Shadow en la región de Kursk causó muertos y heridos en un puesto de mando del grupo de tropas Norte.
El 21 de noviembre, Rusia, en respuesta al uso de armas occidentales, lanzó un ataque combinado contra una empresa de la industria militar de Ucrania, probando un nuevo misil balístico de alcance intermedio Oreshnik en configuración hipersónica sin armas nucleares.
En su alocución televisada, el presidente Vladímir Putin advirtió que Rusia decidirá sobre un mayor despliegue de misiles de mediano y corto alcance y fijará los blancos a destruir durante los ensayos adicionales de esas armas «en función de las acciones de EEUU y sus satélites». Al día siguiente, Putin adelantó que Oreshnik se comenzará a producir en masa y se incorporará a las Fuerzas de Misiles Estratégicos de Rusia. Sputnik
