De la Democracia a la Autocracia
HORACIO ARMANDO HERNÁNDEZ OROZCO
“La Ola” (“Die Welle”) película de drama alemana, dirigida por Dennis Gansel, con la actuación de Jürgen Vogel (Rainer Wenger), Frederick Lau (Tim), Max Riemelt (Marco), Jennifer Ulrich (Karo), Christiane Paul (Anke Wenger), Elyas M’Barek (Sinan) y Cristina do Rego (Lisa); su estreno fue el 19 de enero de 2008.
En la semana de proyectos de un Instituto escolar, se ha fijado como objetivo enseñar los beneficios de la democracia; el profesor Rainer Wenger debe explicar qué es una autocracia y decide realizar un experimento en la clase para demostrar que la dictadura puede aparecer en cualquier democracia.
Basada en la novela homónima de Todd Strasser (1981), inspirada a su vez en el experimento de la Tercera Ola, realizado en 1967 por el profesor Ron Jones en un instituto de Palo Alto, California, Estados Unidos.
DE LA ANARQUÍA
A LA AUTARQUÍA
Rainer Wenger, un carismático profesor de instituto ansiaba dirigir un proyecto educativo en torno a la anarquía, pero otro profesor se ha adelantado, y debe conformarse con abordar en su clase la autarquía.
La etimología del término anarquía designa, de una manera general, aquello carente de principio director y de origen, lo cual se traduce por «ausencia de apriorismo», «ausencia de norma», «ausencia de jerarquía», «ausencia de autoridad» o «ausencia de gobierno», y sirve para designar aquellas situaciones donde se da la ausencia de Estado o poder público.
Mientras que el término autarquía tiene dos raíces etimológicas diferentes, ambas procedentes de la lengua griega; por un lado, autarquía puede derivar de autárkeia (autosuficiencia) que es un concepto de filosofía moral, o por otra parte, la noción puede originarse en autarchía, un concepto que se traduce como poder total, que se refiere a una situación del orden político.
Obvio que el tópico a tratar en clase por Rainer Wenger será la autarquía como sistema de gobierno.
EL PODER DE
LA DISCIPLINA
Rainer decide abordar la enseñanza sobre autocracia de una manera única y participativa; y para ello pregunta al grupo: “¿Piensan que en Alemania no sería posible que volviera otra dictadura?” y un alumno contesta: “De ningún modo, ya hemos aprendido la lección”.
La respuesta dada en pleno siglo XXI, a más de 70 años de haber concluido la Segunda Guerra Mundial, parece contundente, pero para desafiar esta noción, el profesor comienza un experimento a través del lema: “El poder mediante la disciplina, fuerza mediante la comunidad, fuerza a través de la acción, fuerza a través del orgullo”.
A través de la disciplina, el profesor logró que todos sus alumnos entrasen a su aula y, en menos de 30 segundos, se sentaran con actitud atenta y con la espalda bien recta, resueltos a iniciar la clase.
Las reglas estrictas en el aula exigen la obediencia absoluta y promueven la unidad; los estudiantes adoptan rápidamente estas nuevas reglas, pero ¿cómo es que se ha logrado esto?
LOS JÓVENES Y LAS
IDEOLOGÍAS TOTALITARIAS
Cada día Rainer articula sesiones muy prácticas, en que presenta los elementos que explican el atractivo de la autocracia: espíritu de grupo, ideales comunes, ayuda mutua, uniformes y parafernalia exterior; un día les pide que vengan todos con jeans y camisa blanca, que designen a un líder, que le den nombre al movimiento, que diseñen un logo, para este movimiento que denominan «La Ola».
Toda ideología totalitaria tiene un proceso de evolución, pero este experimento cuenta con una semana, así que el profesor va agregando diferentes niveles: disciplina, obediencia, uniforme, saludo identificativo, orgullo de pertenencia y respeto al líder; muchas similitudes con la Alemania de los años 30; el propio profesor Wenger ha sido convenientemente votado como líder por los alumnos.
Los jóvenes comienzan a comportarse de manera autoritaria con los que no pertenecen a La Ola, algunos de ellos, de mayor fragilidad emocional, ven en el movimiento la forma perfecta de aumentar su autoestima y espíritu de iniciativa; otros, más estables, cambian su forma de comportarse, proyectando la superioridad del grupo.
El experimento ha captado la atención de toda la escuela y La Ola comienza a expandirse más allá de la clase, atrayendo a más y más estudiantes.
DE LA OLA
AL TSUNAMI
El experimento continúa y se vuelve cada vez más grande y poderoso; pero los estudiantes que han adoptado con entusiasmo la ideología comienzan a exhibir comportamientos extremos y autoritarios fuera del aula, intimidando no sólo a otros estudiantes sino a otras personas.
El impacto de este movimiento en la vida de los estudiantes se vuelve evidente; Marco y Karo experimentan tensiones en su relación, ya que ella se resiste a unirse a La Ola y critica su creciente extremismo; Tim se vuelve cada vez más leal al líder y devoto al movimiento por lo que adquiere una pistola para proteger al grupo.
Sin pretenderlo el profesor ha creado un caldo de cultivo de actitudes violentas, abuso de poder y desprecio de las minorías.
Rainer se da cuenta que el experimento ha ido demasiado lejos y decide ponerle fin; convoca a una asamblea en la escuela para reunir a todos los miembros y revelar la verdadera naturaleza del experimento como una lección sobre el fascismo y la autocracia.
La cinta muestra como el profesor Rainer perdió el control de su experimento, pues se sintió manipulado por el poder y la fascinación de La Ola; también da pauta de cómo los líderes autoritarios pueden manipular a las personas, en este caso, a los jóvenes alumnos con funestas consecuencias.
La película deja al espectador reflexionando sobre la responsabilidad individual y colectiva en la prevención del autoritarismo y la propagación de ideologías extremas en la sociedad.
La autocracia como sistema de gobierno concentra todo el poder de un Estado en una sola persona o institución; no hay límite alguno para el poder del primer mandatario, ya que no existen mecanismos legales que regulen, controlen o limiten sus actos de gobierno; no existe la división de poderes, el origen del poder de quien gobierna suele ser la fuerza, como un golpe de Estado o una sublevación armada, aunque, también puede surgir de un gobierno inicialmente democrático que luego se vuelve autoritario; la duración del mandato de un autócrata es incierta, pudiendo llegar a ser vitalicia; no se cree en las leyes ni en mecanismos legales que limiten la autoridad de quien ejerce el poder, por ello se pretende hacer leyes a modo para perpetuar el poder y desconocer los derechos y libertades; hay represión y violencia como mecanismos utilizados para eliminar cualquier tipo de oposición.
Pero ¿será acaso que la cinta trata sólo de un experimento escolar o mostrar la realidad de un país incierto?
La mejor respuesta la tendrá como siempre nuestro amable lector…
