*Ya no Solamente es Importada; Actúa
la Doméstica
*El Temor por un Nuevo Descontrol,
Está Presente
*Alimentos, los que más Registraron
Elevación
JOEL ARMENDÁRIZ
Contrario a lo sostenido por el gobierno federal, el Banco de México alertó que el incremento en los salarios mínimos podría impactar en la inflación que, persistirá en el rango de 5 a 7 para 2023.
Al mismo tiempo, redujo el crecimiento del PIB, con lo que la economía mexicana no parece gozar de buena salud.
Desde la óptica empresarial a través de la Confederación Patronal de la República Mexicana, se aplaudió que el presidente haya ampliado el Paquete contra la inflación y la carestía (PACIC) iniciado en mayo del 2022 y que se aleje el fantasma del control de precios.
La inflación cerró el 2022 en 7.36, la mayor en los últimos 22 años, conforme a la medición anualizada del INEGI, esto a pesar de que el programa buscaba reducirla no solo frenarla.
Ante la ruptura de cadenas productivas a causa de la pandemia, México ha sido presa de inflación importada, pero al mismo tiempo comenzó a generar su propia a causa de menor producción en productos alimentarios.
Los pronósticos de la Secretaría de Hacienda, con su nuevo titular Rogelio Ramírez de la O, en el sentido de que la inflación sería controlada y reducida, no se cumplieron y, por el contrario, rebasaron las expectativas.
Los analistas del sector privado que son consultados por el banco central se acercaron más a la realidad.
Previeron una inflación cercana a los 7 por ciento.
Durante los meses anteriores, el presidente de la República hacía gala de que en Estados Unidos era mayor la inflación. Sin embargo, el reporte de la FED referido al corte de diciembre, mostró un 6.5 por ciento. 8 décimas inferior a la registrada en México.
PRODUCCIÓN ALIMENTARIA, SE
REDUJO; FALTA FERTILIZANTE
Especialistas en agroalimentos han cuestionado la política seguida por el gobierno que durante sus cuatro años de mandato ha reducido presupuestos y programas que apoyan la producción agropecuaria.
Ante la falta de maíz suficiente, el propio presidente de la República anunció una “reorientación” en el programa Sembrando Vida y ordenó que también se sembrara maíz y frijol.
Sin embargo, los resultados se verán hasta la próxima cosecha. Por lo pronto, se mantienen la importación de maíz amarillo, hasta por lo menos 2025; arroz y frijol, además de cereales.
Uno de los factores que afectó la producción alimentaria fue la escasez de fertilizantes provocado por la invasión de Rusia a Ucrania. Ambos países son productores fundamentales de abono y dejaron de exportarlo por la crisis militar.
De acuerdo con datos oficiales, la producción de fertilizantes en México aún está por debajo de lo requerido, toda vez que las plantas existentes no estaban en operación y comenzaron a hacerlo a principios del año pasado.
Sin embargo, y aunque no se ha informado de donde provienen toneladas de fertilizantes, desde Palacio Nacional se afirmó que se han entregado miles a los campesinos de “manera gratuita”.
EFECTOS QUE NO
SE ADVIERTEN
A pesar del optimismo gubernamental, la constante forma de presumir el “peso fortachón” y la participación de tiendas de autoservicio y dos plantas productoras, la inflación no ha sido vencida.
Si bien se logró la reducción en un punto porcentual con respecto al índice mayor, los precios en los alimentos se mantienen al alza. Los más afectados con pollo, huevo, carne, vegetales y algunos lácteos, además de la tortilla que alcanza hasta los 27 pesos por kilo. En este rubro los supermercados ofertan el producto entre 12 y 14 pesos y el pan blanco pasó de 1.50 a 2.50 pesos por pieza. El de dulce ha registrado incrementos de hasta el 30 por ciento. El pan de caja producido por Bimbo, empresa que participa en el PACIC, lleva tres aumentos y pasó de 27 a 52 pesos el paquete mediano.
Y aunque se sostiene la teoría de que el incremento a los salarios no es inflacionario, por primera ocasión el Banco de México emitió una opinión en contrario.
Hace dos semanas anunció que, en su próxima Junta de Gobierno, se analizará una nueva alza a las tasas de referencia lo que encarecerá más los créditos y el uso de los plásticos.
