Cruz Azul fue un auténtico desastre en zona defensiva y vivió una pesadilla en el TSM. Santos no tuvo piedad, aprovechó los errores de Escobar, Abram y compañía, y masacró a La Máquina. Ramiro Funes Mori sufrió la goleada en un palco del estadio, una presencia que ya le urge a los cementeros para tratar de poner orden en la zaga. 4-0 final.
Los estrategas Fentanes y Aguirre no le movieron a sus esquemas y ambos quisieron revalidar el triunfo de una jornada atrás. El conjunto cementero propuso en la Comarca Lagunera. La Máquina tuvo la posesión, las ganas, pero muy poca imaginación a la hora de atacar. Rodríguez, Antuna, Rotondi e Iván Morales no se pudieron asociar ni una sola vez. La poca creación y nulo peligro fue lo que dominó en la visita.
Los Santos quisieron tomar el control del juego y Cruz Azul se replegó. En ese momento llegó el tanto de los locales. A balón parado, la zaga celeste volvió a sufrir. Marcelo Correa le ganó el duelo a Juan Escobar. El argentino remató al fondo y además de acabar con su malaria personal, también rompió 260 minutos sin que los cementeros recibieran gol.
El equipo de la comarca aumentó la presión, incluso Correa marcó el segundo gracias a las facilidades de la defensa capitalina. Escobar y Abram no se dieron cuenta, y dejaron rematar, pero el atacante lagunero lo hizo en fuera de lugar. El VAR salvó a los azules.
Por fin llegó la conexión entre Charly y Antuna. El Brujo pudo empatar, ya había vencido a Acevedo, pero el esférico cimbró el travesaño. Nacho Rivero lo intentó con un cabezazo al ángulo, pero el joven guardián voló y salvó lo que parecía la igualdad.
La Máquina fue un desastre en la parte complementaria. En 11 minutos recibieron tres goles y sin ningún tipo de respuesta. Primero fue Hugo Rodríguez. El central le ganó el salto a Abram y la ventaja aumentó. Aguirre aprovechó una excelente corrida de Campos y venció a Jurado. Emilio Orrantia puso el cuarto. El charal aprovechó la desconcentración de la zaga, la prendió de volea y aumentó la agonía celeste, que ya son la segunda peor defensiva del torneo y ni siquiera pudieron anotar con todo y un penal fallado de Romero.