ALBERTO F. MENA MALLEN
Muchas, pero muchas gracias al presidente porque está logrando que los mexicanos se unan… pero en su contra. Hace con sus palabras y acciones que se nos quite lo individualista que somos y lo desinteresados por la cosa pública.
Es muy conocida aquella fábula de los cangrejos -muy mexicana-, en el que un comerciante traía tres cubetas con estos moluscos, dos de ellas tapadas para evitar que por el esfuerzo de cada uno se escapara o que otros le ayudaran a salir del recipiente, y una descubierta; las dos primeras eran de americanos y japoneses y la tercera de mexicanos, que impiden que salgan por su esfuerzo y menos los apoyan.
Pero el tabasqueño poco a poco ha logrado que los ciudadanos, se comiencen a unir para evitar que los siga lastimando, tal y como sucede con los médicos nacionales, quienes se irritaron con la decisión de López Obrador de contratar a más de 500 galenos cubanos para que vengan a cubrir las zonas donde los mexicanos no quieren ir y con el argumento de que no hay suficientes especialistas para atender a los enfermos en todo el país, algo que fue desmentido inmediatamente por los especialistas unidos en agrupaciones, foros, y demás.
Incluso hay una rueda un video de médicos en las redes sociales donde directivos de una veintena de asociaciones y colegios médicos, respondieron mediante un comunicado su “profunda desaprobación y enérgica protesta” por la decisión del ejecutivo, particularmente por el pago que se efectuará, donde un porcentaje mayor será entregado al gobierno cubano y el menor a los médicos, debido a lo cual se ha calificado de que se trafica con personas con estas acciones del acuerdo entre ambas naciones.
Las mentiras vertidas por el primer mandatario, con las que trata de cubrir sus acciones de traer a extranjeros al país para que adoctrinen a nuestros ciudadanos, fueron duramente criticados por “sus adversarios”, argumentando que, a los mexicanos, ni les pagan bien, ni los mantienen seguros en los lugares a donde van o que no se les proporcionan los elementos necesarios para trabajar y menos de que no hay especialistas en la República que se puedan contratar.
Es conocido que los narcos cuando tienen heridos, comúnmente secuestren a los doctores que tienen a la mano para que los apoyen a curar a estos delincuentes y en muchos de los casos son asesinados para evitar que los reconozcan o simplemente los tienen en custodia para que sigan curando a sus heridos y nunca son liberados, pero López Obrador jamás señala estas deficiencias que padecen los galenos del país. También secuestran a ingenieros, jóvenes, muchachas y por eso, tanto desaparecido en el territorio nacional.
Habrá que recordar lo que afirman los servidores de la salud, de que este gremio fue el más atacado por la pandemia, ya que México es un país donde murió más personal de este grupo que en otras naciones, aparte de que le han recordado al primer mandatario, que durante los meses más difíciles de la epidemia, recibieron poca atención por parte del gobierno al no surtirles lo necesario para trabajar, por lo que tuvieron que sufragar los gastos con recursos propios.
También el morenista ha unido a las mujeres en su contra, ya que ni las oye ni las ve y los feminicidios se han disparado por la alta violencia que se padece en el país y donde los culpables andan “muy, muy felices”. La impunidad reina en todo México y el presidente trata de tapar el asunto con opinar respecto a algunos casos emblemáticos que se han presentado de muertes de féminas, las últimas en Nuevo León (entidad que ya rebasó a las muertas de Juárez) y ahora en Puebla, donde lo que se hace son puras declaraciones y nada de operación en contra de los autores de estos crímenes.
Ya unió en su contra a los científicos del Conacyt, al tratar de meterlos a la cárcel por calificarlos de corruptos, lo que aún no se comprueba, a los estudiantes y académicos de la UNAM, a quienes calificó de neoliberales y aspiracionistas, a los papás de niños con cáncer, a la prensa que no baja de corrupta y unida a las grandes fortunas y al capital neoliberal, y también ha incluido a los artistas, ambientalistas, actores y actrices que le han demandado a él y a su gobierno detener las obras de una de sus insignias, el Tren Maya, ya que ha destrozado la selva y a los cenotes.
Otras destrucciones son quienes participaban en los fideicomisos que eliminó para utilizar sus recursos en sus objetivos personales, y de la misma manera a las mamás, a quienes obligó a cuidar s sus hijos al desaparecer las guarderías o las escuelas de tiempo completo, lo que ahora tratan de corregir, al volverlas a implementar, luego de las fuertes protestas que ha recibido tanto el presidente como su gobierno. Lo mismo está sucediendo con los médicos a quienes ya ofreció plazas, pero son temporales.
Y anda de mal genio. Tanto, que hasta su equipo de trabajo ya no quiere ni acercársele y cuando pide que se le prepare información, se dice que tiene que ser acorde a sus deseos, pero no a la realidad, lo que, a su vez, hace que las cosas vayan de mal en peor, lo cual también ha generado mayores problemas para el país.
Ahora, el presidente ha unido a mandatarios de Latinoamérica contra Estados Unidos, con eso de que si no invitan a Cuba, Venezuela y Nicaragua, López Obrador no irá a la cumbre de las Américas. Lo que muchos analistas han destacado es que está boicoteando dicha reunión y donde el morenista aprovecha para cuidar su popularidad entre los mexicanos, al calificarlo de líder y excelente operador electoral, ya que lo que busca es no perder su poder y lugar en la historia como estadista y el mejor presidente de México y del mundo. Ya los americanos invitaron a España, ante la situación que provocó nuestro presidente…
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