ITZEL TOLEDO GARCÍA
El 20 de diciembre de 1993 la Asamblea General de las Naciones Unidas estableció que el 3 de mayo sería el Día Mundial de la Libertad de Prensa. Esta fecha se escogió en conmemoración de la Declaración de Windhoek del 3 de mayo de 1991 en la que un seminario de periodistas africanos que se reunió en Windhoek, Namibia apeló a que los organismos gubernamentales y no gubernamentales nacionales e internacionales apoyaran el desarrollo de sus actividades de manera independiente, pluralista y libre para asegurar el desarrollo y mantenimiento de la democracia y también el desarrollo económico. El seminario en la capital de Namibia, organizado por la ONU y la UNESCO, señaló que era necesario el ejercicio de la profesión de manera segura pues tan solo entre 1969 y 1990 fueron asesinados 48 periodistas africanos realizando su profesión y en 1991 17 periodistas y editores se encontraban en prisión.
Desde 1994 el Día Mundial de la Libertad de Prensa se ha aprovechado para dialogar en distintas ciudades del mundo sobre la libertad de prensa y temas de importancia para los medios de comunicación, como son la cobertura de la guerra contra el terrorismo mundial, la asistencia de los medios en zonas de conflicto y países en transición, el periodismo y las elecciones en tiempo de la desinformación, entre otros. Además, desde 1997 cada año se entrega el Premio Mundial de la Libertad de Prensa UNESCO-Guillermo Cano que distingue a una persona, organización o institución por su importante labor para defender y promover la libertad de prensa. El premio lleva el nombre del director del diario colombiano El Espectador, quien fue asesinado por sicarios del narcotráfico el 17 de diciembre de 1986.
Este año el tema de la conferencia del Día Mundial de la Libertad de Prensa es “Periodismo bajo asedio digital” y tiene lugar en Punta del Este, Uruguay. En este evento se reúnen autoridades políticas, periodistas, editores, dueños de medios, activistas, gestores de ciberseguridad y expertos jurídicos para reflexionar sobre el impacto de la era digital en la libertad de expresión, la seguridad de periodistas, el acceso a la información y la privacidad. Este es un tema importante pues si bien el internet ha facilitado el acceso a la información y la realización de investigaciones entre periodistas de distintas partes del globo (por ejemplo, los Panama Papers), también ha habido una extensión de la desinformación y de discursos de odio en los últimos años. Además, se han establecido leyes que reducen la libertad de expresión y el acceso a la información con el pretexto de proteger la seguridad nacional a la vez que grandes empresas digitales han amasado inmensas riquezas al vender datos privados de usuarios. Aunado a ello, periodistas en distintos puntos del globo están siendo vigilados y hackeados, lo que implica que quedan expuestas las investigaciones que están realizando y quiénes son sus fuentes de información, lo cual viola el principio de protección de las fuentes. Además, si la ubicación de periodistas que realizan investigaciones de temas sensibles es revelada sus vidas pueden correr peligro.
El periodismo puede llegar a ser una profesión de muchos riesgos. Entre 2014 y 2019 fallecieron 519 periodistas, casi 1,500 fueron arrestados y 400 fueron secuestrados alrededor del mundo. En el primer trimestre de este año han sido asesinados periodistas en México, Haití y Myanmar, además siete periodistas han muerto por fuego cruzado en Ucrania. Actualmente, México es el país con mayor número de periodistas asesinados y la organización internacional ARTICLE 19 ha señalado que desde el 2000 han sido asesinados 153 periodistas (141 hombres y 12 mujeres); el estado de Veracruz ha sido el más letal con 31 asesinatos. Además, los periodistas constantemente reciben amenazas y son castigados por exponer la corrupción política y las redes de narcotráfico a lo largo del territorio. La impunidad ha reinado en las investigaciones realizadas tras estos asesinatos.
El Día Mundial de la Libertad de Prensa es un evento de diálogo entre organismos gubernamentales y no gubernamentales, pero también puede ser un momento importante para informarnos sobre la situación actual del periodismo, el acceso a la información y la libertad de expresión tanto a nivel nacional como internacional. Asimismo, es un buen momento para reflexionar sobre nuestras prácticas diarias, ¿cuáles son los medios que utilizo para mantenerme informada? ¿comparto a través de redes sociales información fidedigna y respetuosa? ¿cómo puedo contribuir a que exista una prensa libre, plural y segura?
