José Vilchis Guerrero
Durante el período neoliberal el Centro de Investigación y Docencia Económicas (CIDE) se convirtió en una “versión de segunda” respecto al Instituto Tecnológico Autónomo de México (ITAM), afirmó ayer el presidente Andrés Manuel López Obrador.
Indicó que el ITAM tenía de maestros a Pedro Aspe; José Antonio Meade, y Luis Videgaray, o sea, ‘machuchones’ del pensamiento conservador y el CIDE no está entre ellos.
Durante su conferencia de prensa matutina en Palacio Nacional dijo que el CIDE, en su fundación, se creó para la formación de servidores públicos. “Pero después terminaron aborreciendo el servicio público”, acusó.
“Lo del ITAM se entiende, un día vamos a hablar de eso, hasta dónde llegó el poder del ITAM (…) a que se impusiera un candidato (a la Presidencia de la República) del instituto”, dijo.
El Ejecutivo federal añadió que “hablando en plata- (…) quien puso a José Antonio Meade”, ex candidato presidencial del PRI, no fue el ex presidente Enrique Pena Nieto o el PRI, “lo puso Videgaray, porque si vamos a hablar, para qué vamos a andar dorándonos la píldora, es muy aburrido así”.
Ya en el tema del CIDE e ITAM, también se refirió a los reglamentos de becarios del Consejo Nacional de Ciencia y Tecnología (Conacyt), a los que señaló de que han impulsado reformas “retrógradas” y pidió que si ya las descubrieron, pues que se deroguen.
El Presidente López Obrador expresó que es bueno que se den discrepancias en el CIDE, porque ayuda a que se abra un debate sobre estos temas: la educación al servicio de la oligarquía o la educación al servicio del pueblo.
Aseguró que en el CIDE los cambios van a tardar en internalizarlos quienes se oponen a los cambios, “porque tampoco son muy inteligentes, y luego de eso los obnubila el coraje y el odio”.
Sin embargo, acotó, terminarán por darse cuenta de la importancia de que se requiere un cambio verdadero.