El presunto responsable de la masacre de nueve miembros (tres mujeres y seis menores) de varias familias mormonas en el estado de Sonora, norte de México, en noviembre de 2019, fue detenido en el municipio de Maderada, en el estado mexicano de Chihuahua, informó la Fiscalía estatal.
“Esta mañana tuvimos conocimiento de un enfrentamiento en el lugar conocido como La Norteña, en el municipio de Madera, donde elementos de la Secretaría de la Defensa Nacional, se enfrentaron con un grupo delincuencial resultando detenidas cuatro personas”, informó a medios el fiscal de Chihuahua, Roberto Fierro.
Entre los detenidos, el fiscal precisó que se encontraba Francisco Javier Arvizu, alias “El Jaguar“, quien dijo es el presunto responsable de un enfrentamiento que derivó en la masacre de las familias mormonas y destacó el trabajo de los militares.
Previamente, en un mensaje en redes sociales, Adrián LeBarón, padre de Rhonita Miller, una de las víctimas asesinadas junto a sus gemelos de apenas ocho meses de edad, también había informado de la detención.
“Hoy por la mañana hubo un enfrentamiento entre criminales y la Secretaría de la Defensa Nacional (Sedena) en el poblado de La Norteña, en el municipio de Madera, en Chihuahua. Hirieron y detuvieron a Francisco Javier Arvizu ‘El Jaguar’ junto con otros tres sujetos, presuntamente implicados en la masacre de mi familia”, apuntó LeBarón en Twitter.
LeBarón reconoció el trabajo de la Fiscalía General de la República y de la Sedena “para seguir avanzando en el caso de la masacre de mi familia. Ya casi van dos años, siguen muchos responsables sueltos, pero también menos criminales en las calles”.
Además, dijo que le gustaría participar en las audiencias ya que fue su hija, nietos y familia” quienes fueron cobardemente asesinados, quiero estar presente en el proceso que se les siga a estos sujetos”.
Fue el 4 de noviembre de 2019 cuando al menos dos grupos de hombres con rifles de asalto dispararon en una emboscada en la sierra entre los estados de Sonora y Chihuahua contra tres camionetas en las que viajaban mujeres y niños que salieron de la comunidad La Morita, en el municipio de Bavispe, hacia la comunidad mormona de LeBarón.
En julio pasado, familiares de los nueve mormones pidieron al Gobierno de México y al de Estados Unidos no dejen de investigar el caso, el cual, dijeron, está lejos de resolverse.
Recordaron que hasta ese momento había 20 detenidos de un centenar de personas que participaron directamente en la masacre de los familiares, pero ninguno con sentencia.
Además, lamentaron que la FGR no ha logrado en 15 de los 20 detenidos, acusados de delincuencia organizada, “imputar su participación directa en la masacre porque, como es habitual, hay debilidades en la investigación”.