Luego de que tras días de larga búsqueda, este martes 21 de septiembre, los cuerpos de Paola Daniela Campos Robledo de 22 años y su pequeño hijo Jorge Dylan Mendoza Campos de 5, fueron recuperados de entre los escombros de su vivienda, la cual quedó sepultada por el desgajamiento de rocas del cerro del Chiquihuite.
Tras la recuperación de los cuerpos, estos fueron llevados a Fiscalía del Estado, donde fueron reconocidos los cuerpos por sus familiares y posteriormente velados en una vivienda ubicada en la calle de Club de Legión Humbolt en la colonia Lázaro Cárdenas en Tlalnepantla, Estado de México, desde las dos de la mañana de este jueves.
El féretro donde descansan los restos de Dilan fue de color blanco, mientras que su madre fue colocada en otro en color madera ante la mirada de la mamá de Jorge, papá de los niños.
Entre aplausos despiden a Dilan y Paola
Tras toda una noche en vela, esta mañana fueron enterrados en el panteón municipal de la presa donde ya descansa el cuerpo de la pequeña Mia, Dilan y Paola.
Así, este jueves alrededor de las 10:00 de la mañana, Paola y su pequeño hijo Dilan fueron trasladados al panteón para ser sepultados a lado de la pequeña Mía.
Largas filas de vecinos y una gran concurrencia se registró en el panteón municipal, mientras que al salir rumbo al camposanto, los féretros con los restos de madre e hijo fueron despedidos entre aplausos y porras.
El ambiente que se registró fue solemne y de resignación ante la pérdida de esta joven madre y sus hijos, de quienes se presume, en el caso de Dilan y Paola, murieron abrazados en el derrumbe del Cerro del Chiquihuite, ya que fueron encontrados pecho con espalda, según refieren los rescatistas que los encontraron.
Minutos antes de ser sepultados se ofreció una misa donde se pidió el eterno descanso de Paola y sus hijos; además de que también tocó un grupo musical que le gustaba a Paola, llamado ‘Perro Negro’.