Funcionarios de la Casa Blanca aclararon que China enfrenta un arancel del 145%, según reportaron medios estadounidenses. Es decir, el gravamen contra el gigante asiático fue de 20 puntos porcentuales más respecto a lo que anunció en la víspera el presidente Donald Trump.
El diario The New York Times destacó que la medida se suma a las otras existentes como las tarifas contra las exportaciones de automóviles, de acero y de aluminio.
En la víspera, el presidente Trump anunció la imposición de un arancel del 125% contra el gigante asiático, argumentando «la falta de respeto» mostrado por Pekín en los mercados mundiales.
Poco antes, China aumentó los aranceles a los productos estadounidenses del 34% al 84% a partir de 10 de abril.
Pekín tomó represalias contra Washington después de que Estados Unidos anunciara su decisión de cobrar un arancel del 104% sobre los productos chinos a partir del 9 de abril. El presidente de EEUU argumentó que el país asiático está respondiendo a las tarifas comerciales estadounidenses de forma desproporcionada y añadió que la medida se mantendrá hasta que Pekín llegue a un acuerdo.
El 2 de abril, Washington anunció la introducción de aranceles «recíprocos» sobre las importaciones de otros países. El tipo mínimo básico es del 10%, pero el arancel se calibra para cada país y es la mitad de lo que esos países cobran a las empresas que importan productos estadounidenses. Sputnik
