La entidad destacó que el último gran centro sanitario del norte de Gaza quedó «fuera de servicio».
La Organización Mundial de la Salud (OMS) lamentó este viernes el asalto israelí contra el Hospital Kamal Adwan y sostuvo que el desmantelamiento sistemático del sistema de salud en la Franja de Gaza es una sentencia de muerte.
«El desmantelamiento sistemático del sistema sanitario en Gaza constituye una sentencia de muerte para decenas de miles de palestinos que necesitan atención sanitaria», aseveró la entidad en un comunicado publicado en su cuenta de la red social X.
Asimismo, dijo que la agresión de la ocupación al Kamal Adwan “ha dejado fuera de servicio este último gran centro sanitario del norte de Gaza”.
“Los primeros informes indican que algunos departamentos clave resultaron gravemente quemados y destruidos durante el asalto”, indicó.
La OMS agregó que según se informa, “60 trabajadores de la salud y 25 pacientes en estado crítico, incluidos algunos conectados a respiradores, permanecen hospitalizados”.
“Los pacientes en estado moderado a grave se vieron obligados a ser evacuados al Hospital Indonesio, que está destruido y no funciona. La OMS está profundamente preocupada por su seguridad”, señaló.
Puntualizó que esta redada en el Hospital Kamal Adwan se produce “después de que se intensificaran las restricciones al acceso de la OMS y sus socios, y de que se produjeran repetidos ataques contra las instalaciones o sus alrededores desde principios de octubre”.
“Estas hostilidades y las redadas están echando por tierra todos nuestros esfuerzos y apoyo para mantener las instalaciones en condiciones mínimas de funcionamiento”, denunció.
La OMS pidió un alto al fuego inmediato y externó que “este horror debe terminar y la atención sanitaria debe protegerse”.
La Organización para la Cooperación Islámica (OCI) se sumó a la condena de crímenes que Israel comete en la Franja de Gaza, el último de los cuales fue el incendio del hospital Kamal Adwan, ubicado en el norte de Gaza.
En una declaración, la OCI subrayó que los ataques israelíes contra el sector de la salud, incluidos la detención de personal médico, pacientes y heridos, constituyen violaciones flagrantes del derecho internacional humanitario y de los tratados y resoluciones pertinentes de las Naciones Unidas.
La OCI demandó a la comunidad internacional que cumpla urgentemente con sus responsabilidades exigiendo un cese inmediato y permanente de la agresión militar de Israel y garantizando la protección de las instalaciones médicas, los trabajadores de la salud, los pacientes y los heridos. Sputnik
