l Gobierno de México presentó un plan para apoyar a los connacionales que viven en Estados Unidos, especialmente ante las amenazas del futuro presidente estadounidense, Donald Trump, de implementar deportaciones masivas. Esto iniciaría en enero de 2025, cuando el triunfante de las presidenciales del país norteamericano asuma el cargo.
En conferencia de prensa, el canciller mexicano, Juan Ramón de la Fuente, destacó que las acciones se implementan a través de los 53 consulados en el territorio estadounidense.
El plan se divide en las siguientes etapas:
1.Asistencia jurídica brindada a través del Programa de Asesorías Legales Externas (PALE).
2.Verificación del debido proceso y garantía de la notificación consular.
3.Actualización permanente de leyes y acciones antinmigrantes, las que se pueden consultar en el sitio web de la red consular mexicana.
4.El desarrollo del programa Conoce y ejerce tus derechos, con el fin de prevenir e informar a los migrantes ante redadas, detenciones o tratos intimidatorios.
5.Planes de acciones locales implementados por los consulados.
6.La creación del Centro de Información y Asistencia a Personas Mexicanas y el desarrollo de una aplicación para que, en caso de una detención, el migrante pueda alertar tanto al consulado más cercano, como a las familias y a la Cancillería mexicana.
7.Mayor presencia diplomática en cárceles y centros de detención.
«Para deportar a alguien en EEUU, [las autoridades locales] necesitan una orden judicial, una sentencia final de remoción, como se dice legalmente (…). Después, debe haber un proceso de detención y para eso, hay una red de centros de detención, que operan esencialmente dos agencias: el Servicio de Inmigración y Control de Aduanas [ICE, por sus siglas en inglés] y la Oficina de Aduanas y Protección Fronteriza [CBP, por su sigla inglesa]», aclaró el titular de la Secretaría de Relaciones Exteriores (SRE) mexicana.
De la Fuente agregó que el Gobierno de México estará al pendiente del cumplimiento del debido proceso, en caso de que algún connacional sea deportado.
Con estas acciones, el funcionario del país latinoamericano indicó que se busca proteger a los 38,4 millones de mexicanos que radican en suelo estadounidense, de los cuales, 4,8 millones son indocumentados.
Posteriormente, De la Fuente mostró que los migrantes mexicanos pagan cerca de 121,5 millones de dólares en impuestos. De estos, 42,6 millones de dólares son solventados por los connacionales con situación irregular.
«Mandan [a sus familias en México] más de 60.000 millones de dólares al año y la cifra representa menos del 20% de lo que en realidad están generando con su trabajo. El resto [del dinero] se queda en EEUU», expresó.
«Son trabajadoras y trabajadores que contribuyen de manera importante al desarrollo de sus comunidades en EEUU y apoyan a sus familias en México», refrendó.
El canciller mexicano reiteró que también se mantendrán las estrategias para apoyar in situ a los migrantes, como las pláticas en consulados para orientarlos sobre procedimientos en su contra.
Desde hace semanas, Donald Trump ha lanzado amenazas sobre realizar deportaciones masivas de personas migrantes que no tienen documentos legales para vivir en Estados Unidos. El temor sobre redadas en centros de trabajo y repatriaciones es real entre la comunidad migrante, como han denunciado varias organizaciones en favor de los derechos humanos.
El American Immigration Council, organización de defensa de migrantes, estimó que el costo de deportar a 13 millones de personas que viven sin un estatus legal en Estados Unidos ascendería a 968.000 millones de dólares en poco más de una década. Sputnik