Las bajas del Ejército ucraniano superaron los 300 militares en los combates en la provincia rusa de Kursk durante el último día, informó el Ministerio de Defensa de Rusia.
«Durante la pasada jornada, las pérdidas de las Fuerzas Armadas de Ucrania superaron los 300 efectivos, además, fueron destruidos dos vehículos de combate de infantería y un automóvil blindado de combate, así como seis morteros, dos estaciones de guerra electrónica y cuatro autos», indica el comunicado.
En total, durante los combates en la línea de operaciones de Kursk, Ucrania perdió más de 30.800 combatientes.
Las pérdidas totales de material bélico de Ucrania incluyen 189 tanques, 123 vehículos de combate de infantería, 107 transportes blindados, 1.095 vehículos blindados de combate, 833 autos, 262 piezas de artillería, 40 sistemas de lanzacohetes múltiples, entre ellos 11 Himars de fabricación estadounidense.
El pasado 6 de agosto las tropas ucranianas iniciaron una incursión armada en la provincia de Kursk y ocuparon varias áreas, lo que provocó el desplazamiento masivo de civiles.
Desde el 9 de agosto, la región vive una situación de emergencia de nivel federal.
El presidente ruso, Vladímir Putin, prometió «una digna respuesta» a la provocación de Kiev, al que acusó de disparar indiscriminadamente contra instalaciones civiles, y reafirmó que Rusia logrará todos los objetivos de su operación militar especial en Ucrania. Sputnik