Las enmiendas a la doctrina nuclear de Rusia «están listas y se van a formalizar ahora», declaró el portavoz de la Presidencia rusa, Dmitri Peskov.
«La evolución de la situación internacional y la escalada de tensiones en nuestras fronteras, la implicación de las potencias nucleares en el conflicto ucraniano, la aproximación de la infraestructura bélica de la OTAN hacia nuestras fronteras, todo ello ha hecho necesario introducir enmiendas en la doctrina nuclear y en los fundamentos de la política estatal en materia de la disuasión nuclear», señaló Peskov en una entrevista con el canal de televisión Rossiya.
El uso hipotético de armas nucleares se especifica en la doctrina militar y en los ‘Fundamentos de la política estatal de la Federación de Rusia en materia de disuasión nuclear’.
El 25 de septiembre, en una reunión con los miembros permanentes del Consejo de Seguridad de Rusia, Putin propuso actualizar los fundamentos de la política estatal en materia de disuasión nuclear. El mandatario indicó que la nueva redacción de la doctrina considera como un ataque conjunto a Rusia la agresión de cualquier país no nuclear en la que participe o que se lleve a cabo con el apoyo de un Estado nuclear.
Putin destacó que Moscú se reserva el derecho a utilizar armas nucleares en caso de agresión, incluso si el enemigo supone una amenaza crítica para Rusia utilizando armas convencionales.
«Las mentes frías [en Occidente] lo han captado, mientras las mentes temerarias siguen adelante con su política temeraria, cuyas secuelas pueden ser muy, pero muy, negativas para todos», indicó el portavoz del Kremlin.
Peskov rehusó contestar a la pregunta de cuándo se haría efectivo el nuevo enfoque a la doctrina nuclear y declaró que es más bien prerrogativa de los militares que monitorean los cambios en el uso de armas occidentales en el conflicto y el grado de implicación de Occidente.
El vicepresidente del Consejo de Seguridad de Rusia, Dmitri Medvédev, opinó hace unos días que un masivo ataque enemigo en territorio ruso con medios aeroespaciales de destrucción, como aviones, misiles y drones, podría, en determinadas condiciones, convertirse en una razón para el uso de armas nucleares.
Los cambios en la doctrina nuclear de Moscú se producen en medio de los debates en algunos países de la OTAN sobre permitir o no a las tropas ucranianas atacar con sus misiles territorio profundo ruso, más allá de la línea de combates en el Donbás.
Rusia continúa desde el 24 de febrero de 2022 la operación militar especial en Ucrania, cuyos objetivos son proteger a la población de un genocidio por parte de Kiev y atajar los riesgos de seguridad nacional que representa el avance de la OTAN hacia el este.
Ucrania es apoyada militarmente por la OTAN, el bloque bélico que integran 32 países, tres de ellos –Estados Unidos, Gran Bretaña y Francia– poseen armas nucleares. Sputnik