SE COMENTA SOLO
CON
CARLOS RAMOS PADILLA
Totalmente fuera de lo ordinario fue el domingo 19 de mayo. Un Centro Histórico tomado por la ciudadanía por la llamada marea rosa, tarde/noche de semifinal del fútbol mexicano y debate, el tercero, a la Presidencia del país.
Día en que el presidente mostró su baja estatura y su reducida política al destinar el tiempo de la cadena nacional a polemizar sobre el color que portan los ciudadanos en una manifestación pública o si permite que la bandera nacional esté o no en la asta monumental del zócalo.
El músculo social se hizo presente no solo en la CDMX sino en distintas metrópolis del país al grito de “narcopresidente”, “fuera Morena” y “Sheinbaum corrupta”. Es decir, como nunca y aún fuera de las urnas, se ha multiplicado el hartazgo hacia una administración pública indolente, negligente, mentirosa y provocadora de divisiones y rencores.
Las mentiras presidenciales son abundantes y cada vez más grotescas. La exhibición de actos ilícitos, tareas irregulares y abierta corrupción y nepotismo dejan al mandatario en un desastroso cierre de sexenio. El domingo19, la sociedad dejó en claro que México necesita y urge de un cambio. Para el día 29, la Sra. Sheinbaum llama a una “fiesta” cuando está herida por su arrogancia y prepotencia. No tiene justificación el presumirse como científica ambientalista y dejar a la CDMX con crisis de agua y contingencia diaria.
Demoledora Xóchitl cuando muestra imágenes de Carlos Imaz recibiendo fajos de dinero y le replica a Sheinbaum que ella nunca verá a su marido en actos de rapiña como al suyo. Para Sheinbaum todo caso irregular que incluso involucra a muertes, son eventos viejos y ya tratados.
Domingo de fuertes raspones contra Morena en las calles y durante el debate.
La nación ha perdido su vocación y disciplina, su armonía y estabilidad. El narcisismo del presidente le permite creer que todo está bien, una conducta protagónica, enfermiza y mesiánica. Le ha arrebatado al pueblo sus medicinas, su seguridad, su educación, su estabilidad económica, su convivencia, sus instituciones y pretende ahora hasta prestar o no los símbolos patrios.
Saben y bien que las condiciones están dadas para entregar la Presidencia a la oposición. Los atropellos, pifias y engaños reflejan desesperación. Usan a los empleados de correos como mensajeros fuera de la ley para entregar propaganda a favor de Morena, inútilmente intensifican su engaño de que se arrebatarán los apoyos sociales, es descarado el acarreo, buscan el voto corporativo sindical, es decir, la política sucia, la trampa.
Cierto que lo visto en las calles es muestra de solidaridad, pero la decisión estará en las urnas el domingo 2 de Julio, ya a unos días y ese será otro fin de semana intenso.