Se van por falta de trabajo

Punto de Vista

 

Por Jesús Michel Narváez

 

Durante los últimos cuatro años, la voz presidencial afirma que México ha mejorado tanto que se ha reducido el número de migrantes nacionales.

Un informe del INEGI, relacionado con la Encuesta Nacional de la Dinámica Demográfica (Enadid) revela que la emigración de mexicanos a otros países subió un 58 por ciento, a un total de 1.2 millones en los últimos cinco años.

¿La causa principal para dejar el país? el 82.4 por ciento lo hizo por motivos relacionados con el trabajo.

¿Dónde están los miles de empleos que tiene registrados el IMSS?

El huésped temporal de Palacio Nacional ha insistido hasta el cansancio que los migrantes, en general y sobre todos los que llegan a México para cruzar el territorio y llegar a la frontera norte, no lo hacen por gusto.

Los tres elementos que se manejan para justificar el abandono del país en donde se nació, son: hambre -pobreza extrema- o falta de empleo; persecución política o temor de perder la vida a manos de los criminales.

Los tres elementos se conjuntan en México.

Porque sí hay perseguidos políticos. No es la mayoría, pero los hay.

Por supuestos que los más son aquellos que no encuentran un empleo regularmente remunerado y lo que les pagan no alcanza para apoyar a sus familias y el desarrollo personal.

Con los números del INEGI, institución que presumiblemente no altera números, se exhibe el fracaso de los programas sociales del campo, sobre todo, Sembrando Vida. A quienes están incluidos, se les pagan 5 mil pesos menos el descuento del 10 por ciento para un fondo no explicado. Esa suma son unos 290 dólares, a la paridad actual, con lo que sencillamente no salen de la pobreza.

Según los datos del Banco de México, en donde se registran las remesas que envían los connacionales, cada una de ellas es de 300 dólares, como mínimo, y ello implicaría que el emisor se queda con buena parte para subsistir en el lugar en que se encuentre y desarrollando el empleo, como diría el alto vacío Vicente Fox “que ni los negros quieren realizar”.

De los tres estados que encabezan la lista de exportación de mexicanos, están dos que son gobernados por personajes surgidos y militantes de Morena: Veracruz en primer lugar y Oaxaca, en segundo. El intermedio es Guanajuato.

Sorprende que en la lista no aparezcan entidades como Zacatecas o Jalisco que prácticamente hicieron de la migración una cultura. Son los datos oficiales, sin embargo.

Por eso mismo, hay que preguntarse: ¿con cara exige el señor López frenar la migración centroamericana mediante la creación de empleos si es incapaz de darles trabajo a sus gobernados?

El tema no es menor y explica la razón por la cual el dinero que envían los connacionales se ha incrementado desde hace cinco años y ya alcanza la friolera de 65 mil millones de dólares, es decir, más de un billón de pesos.

O lo que es lo mismo: 11 por ciento del Presupuesto de Egresos de la Federación.

¿Dónde está el bienestar de esos 1.2 millones de mexicanos que tuvieron que emigrar, legal o ilegalmente a Estados Unidos?

Al fracaso en la atención de salud a los mexicanos, se suma la no-estrategia de seguridad para combatir al crimen organizado y el narcotráfico -que sigue produciendo fentanilo- y, por supuesto, los empleos mejor remunerados y, sobre todo, el abandono del campo.

El inquilino del virreinal inmueble, se llena la boca por los miles de millones de dólares que envían los “héroes anónimos” y es incapaz de admitir que México es el mayor exportador de humanos.

Por cierto, el dato del INEGI precisa también: 87.9 por ciento se fueron a Estados Unidos, con un 40.6 % de estos que ingresaron sin documento.

¿Algo de qué presumir?

Debería estar avergonzado por el fracaso de sus políticas económica y social.

E-mail: jesusmichelmp@hotmail.com, Facebook Jesus Michel, X @misionpolitica y en Misión, Periodismo sin Regaños martes y jueves de 16 a 17 horas por Radio Cañón en el 760 de amplitud modulada

 

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