El Debate del Domingo, una Nueva Decepción

 

*En el “Palacio de la Pureza”, se Gesta

el Continuismo con Sheinbaum

*Xóchitl Quedó a Deber; Oprimió el Botón

de Pausa en Plena Batalla

*Álvarez Máynez Ratificó su Falsa Sonrisa

y Disparó al Aire sin Dañar

*Sin Explicación, el Debacle fue Recortado 

y Solo Duró 103 Minutos

 

 GERARDO LAVALLE

 

Tres aspirantes a gobernar México. Dos mujeres y dos caminos que no se juntan. Un varón que hace un juego perverso en favor del continuismo y sí, con ofertas inviables.

Xóchitl Gálvez cedió espacios. Calló ante los temas de migración y de inseguridad.

Claudia Sheinbaum rehuyó admitir las realidades y se colocó como la creadora de un mundo alterno, en el que solamente caben las propuestas del presidente López Obrador y se excluye la participación de las oposiciones. Una mujer que supone tener la verdad absoluta y la defiende, sin razonamientos, solamente por la ambición de ser la primera presidenta del país.

Debate por momentos que provocó aburrimiento. La falta de argumentos ya no sólidos sino medianamente creíbles, cancelaron la oportunidad de saber en realidad qué proponen para sacar a México de las nueve crisis en la que ha generado el gobierno de la cuarta transformación.

Se diría y con razón que los ciudadanos se quedamos huérfanos de saber las novedades y cómo hacerla realidad.

Repetir lo que se ha escuchado, en el caso de Sheinbaum, durante tres años, no disipa dudas y no diseña un futuro. Más de lo mismo, con la narrativa de que todo está “requetebíén” y el renovado yoyismo de “cuando yo fui jefa de gobierno bajé los delitos de alto impacto, puse en marcha becas para los nuños que estudian en las escuelas públicas y recibimos la mayor inversión extranjera directa…”, no conmovió a nadie.

El caso de Xóchitl dejó sembrada la duda de si es capaz de revertir las decisiones equivocadas emanadas desde Palacio Nacional y dejó de exponer proyectos concretos para avanzar en el cambio y se conformó con su slogan “yo sí sé cómo hacerlo”. Y con el “descubrimiento” de que Mario Delgado está bajo investigación en Estados Unidos por el “huachicol fiscal”, supuso haber “cumplido”. Del tema, conocido desde hace meses y expuesto en Tamaulipas, no mostró nada nuevo y se conformó con hablarlo. Su insistencia del narcopartido, probablemente real, mostró que hay poca “carne en el asador” para convencer y venceré. En el debate, nada qué ver con el evento del mediodía en el Zócalo (hay información desplegada en las páginas de Misión Política). 

Oprimió el botón de pausa en plena batalla. Se pasmó. Guardó silencio innecesario y aunque los moderadores le indicaban si quería hacer uso de la réplica, simplemente dejó los brazos caídos.

Para Máynez la oportunidad de aprovechar los vacíos se presentó y no la aprovechó. Sus proyectos, sin novedad alguna y menos con caminos por andar ya pavimentados, fueron escuchados más no digeridos.

Sheinbaum, la oficialista, la científica, la gobernante, la de la experiencia, careció de argumentos que comprobaran sus dichos. Sin duda, su victoria sería el continuismo. El equivalente de más de lo mismo pero aumentado.

Reconocer al Ejército, la Marina y la Guardia Nacional, es un cliché. Ninguna de las tres fuerzas ha pacificado el país. Prometer que de llegar a la Presidencia de la República mantendrá las “reuniones con el gabinete de seguridad” no garantiza siquiera un mínimo avance para contener la violencia y frenar el narcotráfico y la presencia del crimen organizado.

Su as de la noche: hay más exgobernadores del PRI en prisión que gobernando. Quizá no entienda la razón por la cual fueron encarcelados por quien forjó el “nuevo PRI” y promovió el arribo de jóvenes al máximo cargo en los estados. Y los otros que debieran estar tras las rejas, entregaron las entidades que gobernaban y recibieron el premio: ser embajadores aunque de diplomacia no conozcan ni la ley del Servicio Exterior.

¿Cuántos de los gobernadores de Morena está en la cárcel a pesar de las claras evidencias de nexos con el crimen y enriquecimiento inexplicable?… ¿quién ha demostrado que es mentira la inmensa fortuna de su candidata y amiga Rocío Nahle?… ¿cuántos funcionarios de alto nivel de la actual administración están sometidos a proceso y sentenciados por la estafa doblemente maestra en Segalmex?

En el “Palacio de la pureza” todo es honestidad “valiente” y corrupción galopante y que todo mundo sabe de su existencia. Pero no pasa nada y, la candidata del oficialismo se proclama como la conductora del “país que queremos” sin admitir que, en un país divida cuya población está polarizada, urge la reunificación y dejar de plantear el estigma de que se gobierna solamente para los “simpatizantes”.

Un debate al que se invitó a Morfeo y orilló a un recorte de tiempo.

Programado para estar al aire y ser escuchados las candidatas y el candadito por dos horas, solamente estuvo al aire 103 minutos.

El postdebate comenzó anoche mismo y las mesas de especialistas imitaron a los aspirantes presidenciales. Cada cual por su lado y sin la conclusión que orientara a los ciudadanos. 

 

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