No soy, no puedo ni tampoco quiero ser un líder de opinión: Joaquín López Dóriga

-30 años “al aire” en Grupo Fórmula-

*El poder que dan los medios, solamente marean a los pendejos

Por Edmundo Cázarez C.  

Permanecer 30 años de manera ininterrumpida al frente del noticiero radiofónico y televisivo de medio día, “López Dóriga Informa”, que se transmite diariamente a través de la señal de Grupo Fórmula, en el 103.3 de FM, y de manera simultánea en Telefórmula, se dice fácil, pero sin lugar a dudas, representa un enorme esfuerzo, entrega y pasión, colocándolo en la preferencia de un muy numeroso auditorio tanto a nivel nacional como internacional, así como a través de numerosas plataformas digitales.

El día de ayer, jueves 9 de mayo de este incierto 2024, en punto de las 13:00 horas, al iniciar su espacio informativo, con sobrada alegría exclamó: “Es que, cuando digo 30 años, en ese tiempo era presidente de México Ernesto Zedillo, cuando iniciamos este reto y aquí seguimos. Es un privilegio estar aquí, soportando todo tipo de tempestades Son 30 años de un sueño, de una felicidad. Más de la mitad de mi vida estando aquí con un sentimiento de agradecimiento, y así, seguiremos adelante con más ganas, es un regalo de la vida”

La trayectoria de este destacado periodista, quien tuvo a su cargo la conducción del noticiero de televisión con mayor audiencia del mundo de habla hispana, El noticiero, permaneciendo al aíre entre 2000 y 2016, el cual, se transmitía en el canal de las estrellas de Televisa, Joaquín López-Dóriga, nacido en Velandia (Madrid, 1947), comenzó su actividad periodística durante el movimiento estudiantil del ’68, a la edad de dieciocho años, cuando era reportero del periódico El Heraldo de México. Dos años más tarde, Jacobo Zabludovsky lo invita para que se incorporara al noticiero 24 Horas, en donde se destacó como enviado de guerra en Vietnam, Medio Oriente y Bangladesh.

En repetidas ocasiones, ha sido merecedor de infinidad de reconocimientos a su amplia trayectoria periodística como el Premio Nacional de Periodismo. En 1978, a invitación personal del entonces presidente José López Portillo, fue designado director general de noticieros de XHDF Canal 13, como titular del noticiero Siete Días, compitiendo con su amigo y maestro Jacobo Zabludovsky, pero, en 1981, por instrucciones de Margarita López Portillo, entonces directora general de RTC, de la Secretaría de Gobernación, lo mandó sacar de las instalaciones de la televisora del Ajusco… ¡a punta de metralletas!!

Mi estimado amigo lector de MISIÓN POLÍTICA, es mi deseo compartir con usted, la entrevista que la noche del jueves 5 de enero de 2012, aceptó concederme minutos antes de que entrara “al aire”, en el noticiero estelar del Canal 2 de Televisa, la cual, la llevé a cabo en su oficina que estaba ubicada en el cuarto piso de la televisora de avenida Chapultepec… A lo Mero Macho, una entrevista breve pero sustanciosa.

Una y otra vez, le he solicitado me conceda una nueva entrevista, con una sonora carcajada, simplemente, ha respondido a mis respetuosas peticiones de conversar con él: “Mi querido Edmundo, he aprendido que yo, estoy para entrevistar, y no, para que entrevisten”

Así es que, lo invito para que disfrute de esa breve entrevista que me concedió aquella noche del 2 de enero del 2012

 

-Joaquín, ¿cómo te va en la vida?

– ¡Uta! Me va de pelos, me siento muy, pero muy contento.

-A lo mero macho, ¿sientes mucha responsabilidad hablar cada noche?

Créeme que es una enorme carga y responsabilidad, pero la tomo con el respaldo de este gran equipo de trabajo y de quienes están a la cabeza de noticieros Televisa.

– ¿Lo dices de corazón o es un cumplido para quedar bien con tu jefe, Azcárraga?

-Un tanto incómodo por la pregunta me dice: “Momento… ¡yo no soy hipócrita! Sin la ayuda de este gran equipo, yo no podría hacer esto. Para que funcione un noticiero de televisión, el conductor es lo que menos importa.

-La silla que haces girar cada noche… ¿lo haces para disipar la sombra que dejó Jacobo Zabludovsky?

Ja, ja… ¡Para nada!! Además, en la noche las sombras no existen…

-Entonces, ¿cómo demonios lograste imponer tu estilo personal?

Simplemente, hago lo que tengo que hacer, basado en la importancia de la noticia y en la calidad periodística de cada historia.

– ¿Existe una auténtica política de comunicación social del presidente Calderón? ¿Recibes línea o ya te acostumbraste a ese tipo de presiones?

-Con el rostro un tanto enrojecido, su tono de voz es elevado y expresa: A mí, ni me presionan ni me dan línea. Debo reconocer que el presidente Calderón es muy aguantador tanto para las críticas como para las bromas.

– ¿Es decir, el que se ríe se lleva y el que se lleva se aguanta?

Por supuesto que el que se ríe se lleva. “La línea” en el actual gobierno no existe…

– ¿Te das golpes de pecho para decirme que no manipulas la información?

Quien diga que manipulo la información, no solamente me falta el respeto, sino al público en general. Si alguien es verdaderamente profesional para ver televisión en México, es la misma gente, que detecta inmediatamente cuando se le engaña.

– ¿Los medios de comunicación en México se han convertido en reguladores del poder?

Los medios son medios. ¡Punto!!, y no deben aspirar a más. No son autoridad, jueces, fiscales ni árbitros.

-Entonces, ¿qué me dices de lo que haces en Tercer Grado?

Desmenuzamos la información y tratamos de llegar a lo que le dio origen. Los medios no deben calificar o descalificar a nadie, eso, lo tengo muy claro.

– ¿Tienes el poder para engrandecer o empequeñecer a quien sea al aire?

-Con tono de voz cambiante y extremadamente serio me dice: ¡Perdóname, pero yo no engrandezco ni empequeñezco a nadie al aire! Mi única misión es informar. Nada más.

– ¿Sabrás retirarte a tiempo?

– Se queda pensativo, me observa detenidamente, suspira profundamente y me dice: ¡No lo sé!

– ¿El que voltea para atrás se convierte en estatua de sal?

Yo no volteo para atrás. Cada mañana la comienzo desde cero.

– ¿Cómo te sientes cada mañana al saborear las mieles del éxito y la fama?

Mira Mundo, antes de que me dispares otra pregunta de esas que sabes, déjame decirte que no me considero famoso. Éste, es un oficio al que te acostumbras a trabajar bajo muy fuertes presiones.

-A lo mero macho, te noto muy tenso… Normalmente eres tú quien hace las preguntas y, ahora que estás frente a una grabadora, ¿te inhibes?

En efecto, me gusta más preguntar que responder. No cabe duda de que no es lo mismo.

– ¿A qué México prefieres: al de “la Solución Somos Todos”, como titular del noticiero Siete Días de Canal 13, o al México del nuevo siglo, ¿como titular de El noticiero de Televisa?

No quisiera amarrarlo a una mera cuestión de sexenios, sino a los tiempos. Sin duda, prefiero al México de 2012. El ayer siempre es un referente, no un lastre o ancla.

– ¿De qué arma te has valido para colocarte como líder de opinión?

– ¡Ah cabrón!! En primer lugar, no creo en fórmula alguna ni en toques mágicos. Detesto que se me considere líder de opinión.

– ¿Niegas la cruz de tu parroquia?

-Mira mi querido Edmundo, no es eso… ¡Los líderes de opinión no existen! Son un cliché que han inventado para ungirse como líderes de opinión. No soy, no quiero ni puedo ser un líder de opinión.

-Si no eres una líder opinión, entonces, ¿quién demonios es Joaquín López-Dóriga?

– ¡Pasa mecha!! Soy un informador y nada más. Llevo cuarenta y tres años como reportero y eso seré siempre. Tengo muy claro que esto, lo tuyo y lo mío, es resultado del esfuerzo y la constancia.

– ¿Por qué periodista si eras un “niño bien “?

Desde niño, siempre quise ser periodista. Nunca tuve duda de ello. Quizás, hubiera sido capitán de barco, pero como no tengo uno, lo que más me gusta es ser reportero.

– ¿Cuál de los tres medios en los que colaboras sientes que sea el más deshumanizado?

La columna vertebral de los tres es la información. Cuando llego a Televisa a las seis de la tarde, después de haber pasado por la radio y el periódico, tengo una idea mucho más clara del panorama informativo del día.

-A lo mero macho, ¿manipulas o no manipulas?

-Al escuchar la pregunta, lo noto un tanto desconcertado, observa constantemente su reloj y me dice:Te puedo garantizar y empeñar mi palabra que no”

– ¿Qué comportamiento deberán de adoptar los medios de comunicación en las próximas elecciones presidenciales?

Informar desde un eje de equidad, partiendo de una sola base. Que se escuchen todas las voces.

– ¿Una auténtica democracia o la estamos inventando?

Los mexicanos estamos frente a una competencia electoral franca y abierta, donde tanto el pri, pan y prd, no pueden decir que van a ganar las elecciones. Estamos viviendo una situación inédita para todos y hasta para los mismos posibles candidatos. Será una lucha encarnizada… Y, bueno, prefiero esto a la paz de cementerios anteriores, donde se hacía la campaña como un mero trámite. No vayamos muy lejos: en la campaña presidencial de López Portillo, él, no tuvo ningún contendiente.

– ¿Es verdad que ahora eres simpatizante del pan?

-Con cierto enfado exclama:No, no simpatizo con ninguno de los partidos políticos”

– ¿En Televisa aún siguen siendo soldados del pri, tal y como lo afirmaba don Emilio Azcárraga Milmo?

Ni en Televisa ni en Radio Fórmula son paleros de ningún candidato.

– ¿Pero supongo que ya tienes el tuyo…?

– ¡Carajo!!… ¡No, ni en lo profesional! Porque sería una locura, suicidio profesional o estupidez que alguien pretendiera pensar o suponer que el periodista iba a torcer, manipular o mover el resultado electoral… ¡que conmigo no cuenten para eso!!

– ¿Por qué eres tan incisivo y hasta agresivo en las entrevistas?

-Con una leve sonrisa y utilizando el sarcasmo. responde: “¡Mira, que tú no cantas mal las rancheras! En efecto, hay gente que se enoja; aun así, prefiero que exista gente que se moleste por las preguntas que hago.

– ¿A lo mero macho, un auténtico espíritu de fregar al prójimo?

¡No! Créeme que no lo hago por molestar. Te repito, prefiero que se enojen porque soy incisivo a que se aburran. Nunca le he faltado al respeto a nadie en una entrevista. Una cosa es comprometer y otra, ofender. En mi caso, solamente entrevisto e informo.

– ¿De veras, existe la objetividad?

Hablo de la equidad porque no tengo muy claro que exista la objetividad. O, quizás, se ha convertido en una auténtica coartada.

– ¿Cuántas veces te han coartado tu libertad de expresión?

Bueno, tendría que trasladarme hasta el sábado 5 de septiembre de 1981, cuando, a punta de metralleta, me sacaron de las instalaciones de noticieros de Canal 13 —mucho antes que se convirtiera en TV Azteca—, sin importarles que yo estaba en silla de ruedas, por un padecimiento que tenía en una pierna. Fue una estúpida medida, adoptada por la entonces temida Policía Federal de Seguridad, ordenada por Margarita López Portillo. ¡Así se daban las cosas en México al inicio de los años ochenta!

-Bueno, las cosas han cambiado… ¿Qué tipo de periodismo se ejerce hoy en el México?

Tienes razón, el país es otro. La sociedad es otra. Los medios son otros. Y, tal vez, los periodistas somos los mismos y hacemos lo que sabemos hacer. El periodismo del México del 2012 se ejerce con absoluto respeto.

– ¿A lo mero macho, en México se respeta a los periodistas?

-Mmm… ¡A veces!! Hace un momento me llamó un funcionario de muy alto nivel que se sintió agredido y me dijo: “Eso que dijiste es mentira”; y le respondí que, para mí, era la verdad…

-…Pero para eso existe el derecho de réplica ¿o no?

¡Por supuesto! Tienen derecho de réplica, pero a quienes tienen el poder, les resulta muy difícil despojarse, tal y como lo hizo la sociedad, de todos esos atavismos. (Con el rostro adusto y enrojecido agrega): “No está mal que presionen; lo malo es que uno les haga caso… ¡pero que conmigo no cuenten!!”

-Pero tiras “a matar” en tus entrevistas ¿o no?

¡Já, já! ¡No! Además, ¿para qué chingados los quiero “muertos”? La entrevista es un diálogo y, a veces, hay que apretar un poquito, porque, de lo contrario, se te van vivos o tienes que cortarlos y te dan respuestas larguísimas… Mira, eres igualito, ¡me tienes muy sorprendido!!

– ¿Quién se ha negado ser entrevistado por López-Dóriga?

-Bebiendo un poco de agua y tratando de hacer memoria…Aunque no lo creas, muchos. ¡Hasta se resisten! Supongo que te sucede lo mismo… Saúl Menem nunca me permitió que lo entrevistara. ¡Imagínate, hasta el papá de “El Juli”, ese valiente torero español, ¡me negó que lo entrevistara!! En cambio, tú, sí lograste hacerle una entrevista… ¡y muy chingona!!!

– ¿El poder que da la televisión marea?

– ¡Puff!!… El poder marea solamente a los pendejos.

-Al momento en que su asistente le avisa que ya tiene que desplazarse al estudio “D” para la transmisión de su noticiero, le lanzo dos últimas preguntas:

– ¿Qué opinas de Joaquín López-Dóriga?

-Totalmente descontrolado me dice:¡Pa’su mecha! Pues, ¿qué te digo? Que es un tipo muy complejo: buena onda y arrebatado, un ser como cualquier otro, ¿no crees?”

– ¿Tú le crees a López-Dóriga todo lo que dice en la tele y en la radio?

-Un tanto molesto por la pregunta y sin dejar de observarme contesta: “¿A ti te gustan tus entrevistas? ¡Ja!”

-Saliendo de su oficina, caminando por los pasillos de la televisora le digo:

-Si tuvieras la oportunidad de entrevistar a Dios, ¿qué le preguntarías?

¡’ ¡Uta madre, qué pinches preguntas me haces! ¿Qué le preguntaría? ¡No lo sé! Seguramente, le diría ¿cómo le va en la vida?, así como empezaste conmigo esta entrevista que me tienes confundido.

-Propinándome un abrazo afectuoso con un fuerte apretón de manos, a manera de despedida, me dice: “Ya vete, mi querido Edmundo, ya no sé ni qué madres responderte…”

Muchas felicidades estimado “Teacher” por tu 30 aniversario de tu programa en Grupo Fórmula, que sigan muchos más éxitos con ese mismo tesón y entrega, pero, sobre todo, gracias por tu amistad.

 

 

 

 

 

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