México hace historia en Latinoamérica al organizar el primer debate electoral en una cárcel

Este 3 de mayo, a las 10:00 de la mañana (GMT -6), se realizará en México un ejercicio democrático inédito en Latinoamérica: el primer debate electoral al interior de un centro penitenciario, el cual estará dirigido a los reos cuyos casos aún no han sido enjuiciados y que cuentan con prisión preventiva.

Representantes de las candidaturas a la Jefatura de Gobierno de la Ciudad de México debatirán en el Centro Varonil de Reinserción Social en Santa Martha Acatitla bajo la moderación de la periodista Luisa Cantú. El encuentro será grabado y transmitido a través de las redes sociales del Instituto Electoral de la Ciudad de México (IECM).

«Nos parece un ejercicio muy importante primero que nada porque ayuda al voto informado, pero otro aspecto que es fundamental, y que tiene que ver con la reinserción social, es que este grupo se sienta visibilizado, que la sociedad voltee a ver a los reclusorios, que se entienda que estas personas no están excluidas y ajenas a la sociedad», relató para Sputnik Bernardo Valle, consejero electoral del IECM.

El antecedente directo de este novedoso ejercicio se remonta al 1 de junio de 2018, cuando dos personas recluidas en el Centro Estatal de Reinserción Social «El Amate», ubicado en el estado mexicano de Chiapas, impugnaron ante el Tribunal Electoral del Poder Judicial de la Federación (TEPJF) su exclusión de los comicios que se realizaron ese año.

Así, el máximo tribunal electoral del país determinó que las personas en prisión y sin sentencia tienen derecho a votar, porque se encuentran amparadas bajo el principio de presunción de inocencia. Con ello, se ordenó al Instituto Nacional Electoral (INE) procurar que se garantice el derecho al voto de los reos sin condena, quienes podrán participar en los comicios de este año de manera anticipada del 6 al 20 de mayo.

De acuerdo con el INE, más de 30.000 personas en prisión preventiva en todo el país participarán en los comicios actuales, tanto federales como locales. En el caso de la Ciudad de México, el consejero Valle señaló que serán aproximadamente 1.900 participantes.

«Nosotros no concebimos el garantizar los derechos político-electorales o el ejercicio del voto efectivo exclusivamente con dar una boleta a estas personas para que voten, sino que tenemos que hacer toda una construcción a efecto de que sea un real ejercicio», expresó Valle.

Al respecto, el consejero repasó algunas de las acciones que se han emprendido para la preparación de los reclusos que emitirán su voto a partir del 6 de mayo próximo. Por ejemplo, se han ofrecido capacitaciones de formación ciudadana y educación cívica. También se han transmitido en los centros penales los debates tanto por la presidencia de México como por la Jefatura de Gobierno de la capital del país.

Incluso destacó las capacitaciones dadas a los responsables del resguardo y custodia de las personas en prisión preventiva con el objetivo de informarles los derechos políticos-electorales con los que cuentan las personas bajo su cargo.

«La cereza en el pastel que nos parece que es el debate que se va a dar el próximo viernes de 3 de mayo», dijo el consejero, quien fue el encargado junto con su equipo de trabajo de concretar el innovador ejercicio democrático en México y América Latina.

Para el debate, un comité especial, conformado por tres personas expertas en la materia de prisión preventiva, elegirá al menos 12 preguntas de las que personas entregaron previamente para presentarle a los representantes de los candidatos.

«Un aspecto muy relevante para ellos es el sistema de cuidados, que no termina con ellos, sino que incluye a sus familias, es un tema que les parece muy relevante y por supuesto también el tema de garantizar los derechos políticos-electorales», ahondó Valle al respecto.

Los retos y las perspectivas a futuro

Concretar este histórico debate también conllevó retos como el lograr acuerdos entre los actores involucrados, o bien, la imposibilidad de que fueran los candidatos quienes asistieran al encuentro, o bien, a realizar actos proselitistas.

«Sí nos encontramos con la situación de determinar si era posible el que los candidatos pudieran entrar a los reclusorios a hacer campaña, pero no hay que olvidar que hay una serie de reglas muy estrictas en los reclusorios y que habría que establecer criterios de equidad entre todas las fuerzas políticas», apuntó el consejero del IECM para Sputnik.

Sin embargo, Valle espera que este ejercicio pueda sentar un precedente que pueda ser retomado tanto a nivel nacional como en otros países.

«Lo que hemos hecho es hacer una serie de acciones para que puedan ser tomadas en cuenta en un futuro por otras entidades federativas, la autoridad nacional, por supuesto, y otros países», concluyó.

(Sputnik)