El presidente Andrés Manuel López Obrador reconoció que «no se conoce todavía» la causa de afectación de la calidad del agua, aunque prevé que este jueves «ya se tendrá más claridad sobre lo que provoca la contaminación de este pozo», al comentar sobre la denuncia de habitantes de la alcaldía Benito Juárez, en la Ciudad de México (CDMX), por agua contaminada que se distribuye en la zona, lo cual, señaló, se investiga y dijo que no se descarta que se deba a una posible fuga de hidrocarburos.
Con la afirmación presidencial, se evidencia que las declaraciones del jefe de Gobierno de la Ciudad de México, Martí Batres Guadarrama, al negar que se trate de una fuga de hidrocarburos toda vez que Pemex ya midió la presión de sus ductos y es correcta, carece de veracidad.
En demanda de que las autoridades resuelvan el tema del agua contaminada en Benito Juárez, este jueves los habitantes mantuvieron el bloqueo en la Avenida Insurgentes Sur y su cruce con el Eje 4 Sur Xola, en CDMX, afectando la vialidad y el servicio de la Línea 1 del Metrobús.
Al respecto, durante su conferencia de prensa matutina en Palacio Nacional, López Obrador expuso que «se está haciendo la investigación. Lo primero en estos casos es la protección a la población civil, que no vaya a presentarse una explosión porque haya hidrocarburos en el drenaje o en estos pozos; eso es lo primero, cuidar que no sea un asunto trágico de más gravedad».
