En la actual situación del país, y en particular en el transporte de pasajeros entre poblaciones, el incorporar trenes de pasajeros en 7 rutas de ferrocarriles (6 actualmente concesionadas para carga), como lo marca el decreto presidencial, no atiende a las necesidades del mercado de transporte de pasajeros, “más bien van a entorpecer el transporte de carga de ferrocarriles”, considera el secretario general del Sindicato Nacional de Trabajadores del STC, Fernando Espino.
En su opinión, se tendrán que hacer grandes inversiones, que no se recuperarán por las bajas afluencias de pasajeros, ya que existen otros medios de transportes más eficientes y que atienden puntualmente a las necesidades de los pasajeros, por lo que sostuvo que este servicio no es rentable.
Hizo énfasis que esos trenes en operación demandarán grandes subsidios, lo cual desviará los escasos recursos del estado, para actividades más prioritarias para la sociedad, como es la atención a la salud y al transporte urbano, como el Metro.
Espino Arévalo resaltó que al incorporar trenes con pasajeros se requieren velocidades comerciales más altas, por encima de los 150 km/hr; lo que obliga a mantenimientos más frecuentes y más rigurosos de las vías y de los sistemas de control de tráfico.
Por lo señalado anteriormente, no resulta atractivo para los actuales concesionarios, remarcó.
Y el riesgo está también en que la administración decida que las Fuerzas Armadas proporcionen el transporte con mínimo gasto, en cuyo caso la calidad del servicio para pasajeros y carga se vería comprometida.
Tanto la Secretaria de la Defensa Nacional como la Secretaría de Marina, tienen asignadas la operación del Tren Maya y del Ferrocarril del Istmo de Tehuantepec, respectivamente, no tienen experiencia alguna en la operación de este tipo de negocio, condición que no augura buenos resultados.
Inicialmente, son siete las rutas que el Gobierno de México busca poner de nuevo en marcha para trasladar personas, todas por ahora concesionadas por empresas privadas para operar transporte de carga.
Fernando Espino subrayó que la Ciudad de México y su zona conurbada, integran una de las concentraciones humanas más grandes del orbe, al congregar más de 20 millones de personas, sin embargo, no cuenta con las vías de comunicación y los medios de movilidad que se requieren para atender la demanda de este gran conglomerado.
Hoy en día la capital del país, es la “ Ciudad sin Movimiento”, ya que cuando nos queremos trasladar de un punto a otro, por sus vialidades, la mayoría de ellas, están totalmente saturadas o bloqueadas, como si fueran grandes estacionamientos, sobre todo en las horas pico matutinas y vespertinas de lunes a sábados.
En la Zona Metropolitana del Valle de México circulan más de 5 millones de automóviles y se realizan en promedio, 36 millones de viajes persona/día, lo que genera graves conflictos que derivan en la pérdida de más de 50 millones de horas/hombre diariamente, circunstancia que debemos atender con medidas de fondo que resuelvan la problemática planteada y desincentivan el uso del automóvil, con esos propósitos y para incentivar la descentralización de CDMX, “en los ultimos15 años en diversos foros hemos propuesto soluciones de fondo”, indicó.
Dijo que algunas de sus propuestas han sido promover, con los gobiernos Federal y de las entidades federativas circunvecinas, la construcción de una red de trenes Suburbanos:
Cd. México-Querétaro,
Cd. México-Puebla
Cd. México-Cuernavaca-Acapulco
Cd. México-Pachuca
Concluir Cd. México-Toluca