Uno de los ríos más importantes del Amazonas, el río Solimões, se ha secado y se ha convertido en un desierto mientras el río Negro en Manaos ha alcanzado históricos niveles de sequía, según dieron a conocer este martes medios locales.
El Servicio Geológico de Brasil (SGB) señaló que el río que atraviesa nueve municipios de Amazonas, se encuentra a solo 11 centímetros de la sequía histórica registrada en octubre de 2010.
De acuerdo con medios brasileños, el tramo de la Tierra Indígena Porto Praia de Baixo, en la región de Tefé se encuentra convertido en un desierto donde grandes bancos de arena sustituyen el caudal.
A partir de ello, los municipios Alto Solimões – Tabatinga, Benjamin Constant, Atalaia do Norte, São Paulo de Olivença, Amaturá, Santo Antônio do Içá, Tonantins, Jutaí y Fonte Boa – declararon situación de emergencia.
Por su parte, el río Negro en Manaos, principal afluente del Amazonas, alcanzó este lunes su menor caudal en 120 años, entretanto, el Instituto Nacional de Investigaciones de la Amazonía (INPA) pronosticó que deben bajar aún más los niveles debido a que la sequía se extiende en la región hasta principios de noviembre.
Asimismo, equipos especializados realizaron mediciones en el agua y localizaron temperaturas superiores a los 38 grados Celsius cuando la media está entre los 28 y los 30 grados.
Medios locales apuntaron que la sequía de este año se ha visto exacerbada por el cambio climático y los efectos de El Niño, fenómeno que limita la formación de las precipitaciones. Sputnik