Punto de Vista
Por Jesús Michel Narváez
Miles de millones de pesos que, sumados en cinco años, alcanzan la nada despreciable suma de 1.9 billones de pesos y, además, solamente se ha “reducido la deuda” en 21 un mil millones de dólares. Palabra del agrónomo que “dirige” Petróleos Mexicanos, una empresa del Estado que, haciendo honor a la producción de barriles, es el “barril sin fondo”.
Con el cinismo que caracteriza a los funcionarios de la administración encabezada por el huésped temporal de Palacio Nacional, el que cobra por haber “salvado” a Pemex, desmiente, sin mostrar datos y solo con su palabra, que se incrementó la producción petrolera, que las seis refinerías trabajan correctamente y que la autosuficiencia en combustibles está a la vuelta de la esquina.
Durante una ríspida comparecencia ante el pleno de los diputados, Octavio Romero Oropeza fue descalificado por legisladores de oposición que lo menos que le llamaron es corrupto, ineficiente, incapaz, mentiroso y es uno más de los “títeres del amo” (Andrés Manuel López).
En su “defensa” aclaró que no es verdad el supuesto regalo de 350 mil barriles a Cuba y que la empresa tiene contratos con 26 países del mundo. No mencionó los nombres ni la cantidad que les vende cotidianamente. Con la producción actual, que no alcanza la de 2018, resulta poco creíble el número de clientes que, sin embargo, podrían estar adquiriendo algunas “pipas de las compradas” y que nadie ha visto, cuando la crisis de 2019. ¿Cuánto se exporta de crudo? Una realidad es que se vende materia prima y se compra refinada a precios internacionales. También es verdad que los dos últimos secretarios de Hacienda, incluyendo a Rogelio Ramírez de la O, integran el Presupuesto de Egresos de la Federación con estimaciones inferiores a los que el mercado petrolero ha pagado en cinco años. Nadie sabe en dónde está la diferencia, porque el gobierno federal agotó el Fondo de Estabilización Financiera, no participa de los ingresos a los estados como ocurría en el pasado y se ignora el destino final de miles de millones de dólares.
No debería sorprender a nadie que las arcas estén semivacías a pesar del incremento en la captación de impuestos que, de acuerdo con número del Sistema de Administración Tributaria superó la de 2018 y “sigue subiendo”, y si bien no se han generado nuevos impuestos, los actuales, sobre todo el ISR, abandonó la estabilidad mínima que pasó de 28 a 30 por ciento de cada peso que reciben los micro, pequeños, medianos y grandes contribuyentes.
La lógica no da para entender cómo sin aumentar la base de personas que pagan impuestos y concediendo sin admitir que se hayan recuperado gravámenes no cobrados por años, se incrementó la recaudación.
La petrolera mexicana, tiempo atrás orgullo del país, es ahora considerada la “más endeudada del mundo” y las calificadoras globales tienen considerados los bonos de Pemex como “basura”, lo cual ha elevado el costo de los créditos y los que logra obtener, sin justificación porque a decir del presidente mexicano “hemos hecho mucho sin endeudar al país”.
En la administración del agrónomo, Pemex ha sufrido el mayor número de accidentes: fugas, incendios, perforación de ductos, extracción ilegal de combustibles y la falta de mantenimiento se advierte cuando el mismo director reconoce que hay tuberías con años de uso y se encuentran “naturalmente desgastadas”.
No existe un informe público de los derrames ocasionados en el traslado de hidrocarburos o bien por las fugas de los ductos. Los ambientalistas han documentado decenas de ellas y Pemex, su director, ha negado que sean verdad, no obstante los videos y fotografías satelitales que los comprueban.
Una lástima que no se haya postulado para gobernar Tabasco. Claro, el daño habría sido para los tabasqueños pero el país y Pemex se habría salvado del derroche de recursos, la ineficiencia y, por lo señalado por los legisladores, el hurto.
Seguramente el titiritero estuvo pendiente de la comparecencia y esta mañana saldrá a defender a su muñeco de trapo. Ante tanto cinismo, como anillo al dedo la sentencia de Fidel Castro: la historia me absolverá.
Pues no. Lo juzgó y condenó… cuando menos en el análisis de quienes saben la historia del dictador cubano.
PD: Eduardo Arvizu Marín es desde mañana, el comunicador del INAI. Regresa para cerrar el ciclo de la comisionada presidenta Blanca Lilia Ibarra Cadena. Felicidades a quien lo contrató y al contratado.
E-mail: jesusmichelpm@hotmail.com, Facebook Jesus Michel, Twitter @misionpolitica y en Misión, Periodismo sin Regaños martes y jueves de 16 a 17 horas por Radio Cañón en el 760 de amplitud modulada.
