La Policía comenzó a emplear la fuerza contra los creyentes de la canónica Iglesia ortodoxa ucraniana en el Monasterio de las Cuevas de Kiev, declaró el abogado del monasterio, Nikita Chekman. Las autoridades ucranianas exigen a los fieles y monjes del monasterio que abandonen el recinto religioso.
Chekman afirmó que representantes de la reserva estatal del Monasterio de las Cuevas de Kiev, acompañados por la Policía, entraron en el edificio 70 del Monasterio sin ningún fundamento legal. Como señala la Unión de periodistas ortodoxos, una comisión del Ministerio de Cultura ucraniano llegó al Monasterio de las Cuevas de Kiev para precintar los edificios.
«La Policía usa la fuerza contra los creyentes en el Monasterio de las Cuevas de Kiev», escribió en su canal de Telegram, publicando un video relacionado.
Además del edificio 70, donde tenía su residencia el metropolita Onufri, jefe de la Iglesia ortodoxa ucraniana canónica, también fue sellado el edificio 69, donde se encuentran los talleres del monasterio.
En marzo pasado, el Ministerio de Cultura de Ucrania notificó a la canónica Iglesia ortodoxa ucraniana que rompía de modo unilateral el contrato de alquiler del Monasterio de las Cuevas y que los monjes debían abandonarlo, lo que ellos se negaron a hacer. Más tarde, el ministro de Cultura ucraniano declaró que los monjes podrían seguir en el Monasterio de las Cuevas, si aceptaban pasar a la Iglesia ortodoxa ucraniana cismática.
Pero el superior del Monasterio, el metropolita Pável, afirmó que en ese asunto no podía haber componendas y que los monjes quedarían en el Monasterio de la Cuevas. Entonces a Pável lo pusieron bajo arresto domiciliario.
En el Monasterio de las Cuevas viven más de 200 monjes y novicios, cientos de futuros sacerdotes, estudiantes de la Academia Teológica y del seminario. También alberga el centro administrativo de la Iglesia ortodoxa ucraniana canónica y la residencia de su primado, el metropolita de Kiev y toda Ucrania, Onufri.
El asesor de la oficina de Volodímir Zelenski, Mijaíl Podoliak, declaró en marzo pasado que en Ucrania debe existir solo una Iglesia, aludiendo a la Iglesia cismática, y llamó a «limpiar físicamente» a la canónica. Al Parlamento de Ucrania fue presentado un proyecto de ley para prohibir a nivel nacional la actividad de la Iglesia ortodoxa ucraniana canónica, supeditada históricamente al Patriarcado de Moscú. Sputnik