Por silvestre Villegas Revueltas
Para el mundo occidental que es donde histórica y socialmente se ubica México desde el siglo XIX, la migración y los migrantes han constituido un tema que la más de las veces produjo movimientos de rechazo, actitudes racistas, eventos de extrema violencia y el reconocimiento de ser la migración fenómeno inherente al ser humano.
En los días alrededor de que se redacta el presente texto han sucedido diversos eventos que se relacionan con el tema de la inseguridad y la migración. Esto es, la discusión acerca de si los secuestrados alrededor de la ciudad de Matehuala eran mexicanos, eran migrantes, eran las dos cosas y lo que significa que transitar por una de las carreteras principales de la república, Querétaro hasta Nuevo Laredo se haya convertido genuinamente en una vía de extrema peligrosidad, cuando entre los años ochenta y noventa las familias podían recorrerla sin ningún tipo de temor a ser asaltados.
El segundo episodio se refiere al asesinato de “un empresario” de Nuevo León a quien le quisieron robar su reloj Rolex. Las cámaras no muestran un forcejeo que indique dicho evento, sino más bien un intercambio de palabras y luego disparos por la espalda. Los testimonios señalan que los asesinos hablaban con acento sudamericano y las autoridades del estado de Quintana Roo subrayaron que en la zona VIP de Cancún y Playa del Carmen existen bandas de “venezolanos y colombianos” dedicados a robar casas habitación y viandantes de alto poder adquisitivo.
El tercer episodio es el tenido lugar en la plaza Giordano Bruno en la delegación Cuauhtémoc. De semanas atrás los periódicos informaron que en tal lugar se fueron instalando migrantes, la mayoría de origen haitiano -o sea negros- los cuales vivían, comían, defecaban y se reproducían en aquella diminuta plaza. Los vecinos, que pagan impuesto predial, se quejaron del mal aspecto, olores y robos que ya constituían un problema para los vecinos. El gobierno de la Ciudad de México organizó el traslado de la comunidad de migrantes, la alcaldesa Cuevas instaló unas vallas para evitar que pudieran volver a instalarse nuevos grupos de migrantes y al día siguiente Sheinbaum ordenó se quitaran semejantes vallas; las dos tienen razón, porque por un lado se protege los legítimos derechos e intereses de los vecinos y en otro aspecto, se elimina un obstáculo de libre tránsito garantizado por la Constitución. Asimismo, no es nos debe olvidar que, respecto al suceso de dicha plaza, también intervino el pleito casado entre ambas doñas.
¿Qué unifica los tres episodios arriba señalados? Primero, el innegable flujo de migrantes que ha rebasado la capacidad del estado mexicano. Ya no solo se refiere al personal del Instituto Nacional de Migración sino en el plano de seguridad a la Guardia Nacional y al ejército mexicano. En el plano de lo local, las autoridades municipales en Chiapas, Ciudad de México, Coahuila, Chihuahua, Baja California, Tamaulipas, por mencionar las más importantes, se han visto totalmente desbordadas. Estimado lector, ¿qué ciudad grande o pueblo pequeño resiste el flujo constante de miles de migrantes todos los meses? Ninguno, ni los Estados Unidos donde las autoridades de Texas envían en camiones a miles de migrantes a las ciudades santuario como Washington o Nueva York. A lo anterior se debe agregar que como sucedió en el Londres de 1600, en Nueva York de 1800, en Paris de 1900 y en Colombia como México de los años 2000, la migración masiva produjo y está produciendo sentimientos de un profundo rechazo hacia los migrantes, sean o no negros. Pero hay que subrayar y contrastar que, a los pocos güeros ucranianos les fue muy bien cuando transitaron por estas tierras de Huizrilopochtli.
Finalmente, debemos recordar a los estimados lectores, que la Primera Ministra de Italia acaba de solicitar y obtener poderes especiales para poder lidiar de una manera más efectiva con los cientos de migrantes que vía marítima llegan a las islas y costas del sur de la península italiana. Seguramente los habitantes de Lampedusa como los de Tijuana o los de la Plaza Giordano Bruno en esta capital, están igualmente hartos de los destrozos que, muchas veces sin quererlo, provocan los migrantes los cuales por su misma condición de pobreza extrema son incapaces de remediar ¿A quién le gusta defecar o cocinar en la calle? Solamente la necesidad. Esto último nos lleva a otro tema: ¿qué está sucediendo en el mundo de la globalidad, de la WEB y de la Inteligencia Artificial? Para que a nivel planetario las migraciones de un extremo a otro del planeta sean una molesta realidad. Indudablemente la violencia extrema, la falta de oportunidades económicas, los intereses detrás del mercado de los migrantes, gobiernos evidentemente incapaces y el exceso de población, han facilitado que el mundo hoy viva un fenómeno migrante como no había sucedido desde los tiempos romanos y durante la conquista del continente americano.
