Ciudad de México, San Luis Potosí, Tamaulipas, Oaxaca, Morelos, Jalisco y Guerrero, entre otras entidades, fueron escenario de las marchas a favor de soldados en México con el lema ya generalizado: ‘Al Ejército no se le toca’.
Este domingo se registraron marchas de familiares y personas que apoyan al Ejército en varios estados de la República Mexicana en protesta por la detención de soldados en Nuevo Laredo.
Los elementos están señalados de haber ejecutado a cinco jóvenes que viajaban en una camioneta en esa ciudad del norte del país. Cuatro elementos ya fueron vinculados a proceso por desobediencia y delito del fuero militar.
Además, los militares detenidos y sus compañeros que participaron en la acción del domingo están a disposición de lo que resulte de las investigaciones de la Fiscalía General de la República (FGR).
Lo que se consideró la respuesta a la descalificación presidencial por la marcha, que ue señalada como probable organización del crimen organizado, llevó a familiares, soldados en activo y jubilados, a tomar las calles y reclamar que las fuerzas castrenses sean tratadas con dignidad.
En la capital del País con ausencia de la jefa de gobierno que andaba de gira promocional-, medio millar de personas que se identificaron como soldados en activo, retirados y jubilados marcharon hacia el Zócalo, exigiendo que se paren “los abusos” en contra de los militares.
El presidente dijo hace cuatro días en su conferencia matutina: “Aprovecho para informar de que esa marcha que están convocando tiene propósitos nada justos, sanos, que supuestamente es para defender al Ejército. Que nadie se deje engañar, eso puede estar inclusive promovido por la misma delincuencia”.
La respuesta fue contundente: se suman miles quienes asistieron a las marchas en las diversas capitales de una decena de estados de la Federación.
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