Antes de que te Vayas…
HORACIO ARMANDO HERNÁNDEZ OROZCO
“Decision to Leave”, película surcoreana de romance y misterio dirigida por Park Chan-wook, protagonizada por Tang Wei (Seo-rae), Park Hae-il (Hae-jun), Lee Jung-hyun (Jung-an) y Go Kyung-pyo (Soo-wan); la cinta tuvo su estreno el 23 de mayo en el Festival de Cannes de 2022, donde Park Chan-wook ganó el premio al mejor director.
Hae-Jun, un veterano detective de homicidios, investiga la muerte de un hombre en la cima de una montaña; las sospechas recaen en Seo-Rae, una joven de origen chino esposa del difunto, pero cada vez más el detective se siente atraído hacia esa misteriosa mujer.
Una inusual historia de amor entre un detective y una femme fatale moderna, donde no hay final feliz; el espectador está frente una fina radiografía de la sociedad moderna disfrazada de thriller romántico.
PRIMER CASO
Hae-Jun trabaja en el Departamento de Policía de Busan, mientras su esposa Jung-An reside en Ipo, y sólo la ve una vez a la semana; junto con su novel asistente Soo-wan acuden a una zona rocosa, donde un experimentado escalador ha caído de una montaña, todo indica que se trata de accidente; durante la investigación el detective sospecha de Seo-Rae la joven viuda.
Pero ¿por qué sospechar de una mujer que aparentemente no se encontraba en el lugar de los hechos?
La sospecha sobre la viuda radica por sus muestras insuficientes de dolor, un rasguño en la mano, moretones en las piernas y el torso y un tatuaje con las letras KDS, que corresponden a las iniciales del esposo fallecido de nombre Ki Do-soo, que están en la forma en que éste marcaba sus pertenencias; estas circunstancias son suficientes para que Hae-Jun establezca una línea de investigación para considerar que se trata de un homicidio.
Una línea de investigación, dentro del sistema educativo, se entiende como un eje temático mono o interdisciplinario que incluye un conjunto de objetivos, políticas y metodologías científico-técnicas encaminados a la solución de uno o varios problemas identificados en las áreas y que permite generar nuevo conocimiento; este método es utilizado en la criminología para resolver crímenes.
UN SEGUNDO CASO
Hae-Jun realiza vigilancias nocturnas fuera del edificio de apartamentos de Seo-Rae, se obsesiona con ella y se imagina a sí mismo dentro de su apartamento; ella lo descubre acosándola, por lo que el detective continúa con una diversa investigación también de homicidio.
De nueva cuenta la víctima es un esposo y las líneas de investigación de este segundo caso determinan que el asesino es Lee Ji-gu, un ex novio de Oh Ga-in, quien es la esposa del hombre muerto; por lo cual tratan de obtener su declaración, aunque cuando es acorralado el presunto homicida en la azotea de un edificio deja entrever que está asumiendo una responsabilidad de algo que no hizo, y todo ello para que su antiguo amor no vaya a la cárcel.
Esta situación impacta en el detective Hae-Jun porque estaba plenamente seguro que el autor de ese homicidio era Lee Ji-gu, pero ha fallado su línea de investigación.
El Jefe de Policía concluye que el primer caso no fue un accidente, sino un suicidio, pues se encontraron notas en que Ki Do-soo reconocía haber sido un corrupto oficial de inmigración y que antes de la deshonra prefería quitarse la vida; por lo cual Sea-Rae, junto con Hae-Jun destruyen toda la evidencia recolectada; aunque siempre quedó la duda en la mente del investigador.
UN TERCER CASO
Trece meses después, Hae-Jun se muda a Ipo para vivir con su esposa Jung-An; en el mercado de pescado se encuentra a Seo-Rae con Ho-Shin, su nuevo esposo, un inversionista comercial; al día siguiente, Ho-Shin es encontrado muerto en la piscina de su mansión. Hae-Jun está convencido de que Seo-Rae es la culpable, ella admite que sólo drenó la piscina para que la sangre no lo perturbara.
Obviamente, el detective tiene plena sospecha de que ella ha matado a este segundo esposo, más cuando ha admitido que modificó la escena del crimen, por lo que intentará establecer una línea de investigación que lo conduzca a esa conclusión; sin embargo, ahora no cuenta con muchos elementos para llegar a ello.
La cinta revela datos de que Seo-Rae con pastillas de fentanilo en acto de eutanasia mató a su propia madre y que factiblemente también mató a una segunda anciana con esas pastillas; de que cambió su teléfono celular para establecer una coartada en el crimen de su primer esposo; que destruyó pruebas que la podrían implicar en ese homicidio; y todo ello lo descubre Hae-Jun, pero lo calla.
Hay tres homicidios, y en cada uno de ellos hay una pequeña historia de amor y de sacrificio; el primer caso, Hae-Jun se ha enamorado de Seo-Rae y aunque descubre que su línea de investigación era cierta, prefiere hacerse cómplice y no revelar nada, sacrifica su propio ego de investigador; en el segundo caso, el acto de amor es evidente, pues Lee Ji-gu se atribuyó la culpa del crimen para salvar a su amada Oh Ga-in; y en el tercer caso, el acto de amor viene por Seo-Rae, pues con un sacrificio personal tratará de reivindicar el ego de su amado Hae-Jun.
El director Park Chan-wook, en una entrevista, confesó que se inspiró en la canción coreana ‘Niebla’, que le ha gustado desde joven; por eso la historia transcurre en Busan, una ciudad con niebla y a través de un thriller se narra una historia de amor.
La psicología de los dos personajes principales está bien trazada: Ella, Seo-Rae, como mujer no lo ha tenido nada fácil en la vida, es muy madura, rigurosa y persistente en el amor, es claro que lo da todo de sí misma, por eso cuando le falla a la persona que ama, prefiere una salida drástica; Él, Hae-Jun, es el jefe de la unidad de homicidios, está orgulloso de su trabajo, es metódico, organizado y amable, bastante competente y la gente lo admira, por eso cuando su instinto de investigador falla, se hunde en el insomnio y la ansiedad.
En una frase se encierra el subtexto y la trama de la película, el joven detective Soo-wan le dice al experimentado inspector Hae-Jun: “Matar es como fumar, sólo la primera vez es difícil”; pero ante las decepciones amorosas, igual duele la primera que la última.
O ¿será que nuestro amable lector tenga otra mejor opinión?…
